El fiscal federal Carlos Rívolo pidió a la jueza María Eugenia Capuchetti que ordene una segunda pericia sobre el teléfono celular del diputado Gerardo Milman en la causa que investiga el intento de asesinato de la expresidenta Cristina Kirchner. El dirigente del PRO es investigado por, supuestamente, planificar y conocer las intenciones de Fernando Sabag Montiel, según el testimonio de dos testigos.
Rívolo recibió el informe del primer peritaje que ordenó la magistrada, pero advirtió que «resulta a todas luces insuficiente» y por ello reclama habilitar la Feria Judicial que se inicia la semana próxima para efectuar un segundo estudio y conocer con más precisión si existieron comunicaciones entre el diputado y los atacantes de la exmandataria o si sabía lo que iba a suceder el primero de septiembre de 2022.
Este nuevo peritaje debería realizarse «en forma manual, con el objeto de examinar cada una de las comunicaciones y demás registros obtenidos mediante la extracción forense, en el período indicado por el Tribunal Superior, que hubiere mantenido el nombrado vía aplicaciones de mensajería, redes sociales y/o correos electrónicos, a los fines de verificar o descartar fehacientemente aquéllos extremos», detalló el fiscal en su planteo al que tuvo acceso NA.
El primer estudio se hizo mediante compulsa de palabras clave como «Cristina», «Kirchner», «arma», «Recoleta», «asesinar», «Copitos» y «costa» entre otros términos. Sin embargo, la fiscalía consideró: «El método escogido resulta a todas luces insuficiente para realizar esa tarea, por cuanto es innumerable el uso de vocablos que podrían utilizarse para referirse a los dichos que, según el testigo Jorge A. Abello, habría proferido el nombrado en el restaurante Casablanca«.
Las sospechas sobre Gerardo Milman
El análisis de su teléfono celular se centró en el período comprendido entre el 1 de julio de 2022 y el 10 de mayo de 2023. El celular peritado era un iPhone 14 Pro, modelo que salió al mercado después del intento de magnicidio. Esto llamó la atención, ya que Milman aseguró que el teléfono que usaba en ese momento se le había perdido o fue robado durante una mudanza.
Más allá de este particular detalle, el diputado alertó que había «material sensible» en su dispositivo por su rol político y procedieron a la pericia, donde detectaron 596 archivos dañados o borrados que no pudieron visualizarse. Los especialistas ahora investigan si en estos archivos había material relacionado al caso de Cristina Kirchner, o son solamente elementos borrados sin relevancia.