Un momento realmente cargado de sentimientos fue el que se vivió en Cuestión de Peso (CDP), el ciclo que lleva adelante Mario Massaccesi a través de la pantalla de Canal Trece. Fue allí donde uno de los participantes contó la discriminación que sufrió y que lo llevó a pensar en quitarse la vida.
Se trata de Guillermo, quien no se guardó absolutamente nada. «A mi sexualidad la tengo más que asumida. Mi vieja me enseñó a que no me importe lo que digan. Y aprendí a convivir con eso. Pero después, cuando empecé a aumentar de peso, el bullying ya no solo era por mi sexualidad, sino que también era por mi sobrepeso”, expuso.
«El tema del bullying en preescolar, que es lo que más recuerdo, y en la primaria, fue bastante heavy de parte de los varones, porque siempre tuve una manera de ser afeminada y siempre terminaba juntándome con las mujeres. Me acuerdo de que tenía un compañero que siempre me pegaba. Mi mamá varias veces tuvo que ir a hablar por ese tema. Yo jugaba al fútbol ñpara demostrar que no era, tratando de disimular la situación y también para ser aceptado. Hasta el día de hoy, el primer insulto que me tiran en redes es acerca de mi sexualidad”, lanzó Guillermo.
En el programa de Mario Massaccesi decidió ir por más. “Mi mamá siempre estaba preocupada y ella siempre decía: ‘yo por vos le voy a arrancar los ojos a quien sea’. Ella me defendió toda mi infancia de todas esas agresiones y de todo lo que me pasaba a mí en el colegio, porque yo no tenía los medios, no sabía cómo hacer para defenderme. En séptimo grado, llegué a ponerme de novio con una chica para esconder eso. En Venado Tuerto, nunca recibí comentarios de los vecinos directamente a mí, sino que hablaban por atrás. Y ahí siempre estaba mi mamá para defenderme», manifestó .
“20 años de poder decir: ‘yo soy esto, quiero que me acepten así’. Fueron 20 años que se me pasaron sin vivir como me hubiese gustado vivir. No es fácil estar en una sociedad donde todo el tiempo te dicen que algo para ellos está mal. No está bueno. Al tema de mi sexualidad, sumarle mi sobrepeso, que es peor aún. Porque no solo sos homosexual, sino que también sos gordo. Entonces también tenés que sufrir por eso», aseveró.
«Yo dejé hace 20 años de luchar con el tema de mi sexualidad y sigo luchando con el tema de mi obesidad. La única que me miró siempre como yo era en realidad, era mi vieja. Ella siempre me dijo que estaba orgullosa de mí. Fui muy independiente desde muy chiquito y eso me ayudó a estar hoy acá y seguir peleándola. Se me cruzó por la cabeza quitarme la vida. Por el bullying, por la discriminación, por todo. Pero mi vieja era la que me sostenía. Cuando mi mamá me decía: ‘yo estoy orgullosa de vos’, era un impulso para mí para seguir», sentenció Guillermo.