Lo que debía ser una celebración inolvidable por sus 18 años, acabó generando una enorme controversia. Lamine Yamal, la joya del Barcelona y figura emergente del fútbol mundial, quedó en el centro de un escándalo tras su fiesta de cumpleaños, realizada en una casa rural en Olivella, a unos 50 kilómetros de la ciudad condal. Una denuncia pública amenaza ahora con escalar a instancias legales.
Entre los asistentes al festejo figuraban compañeros del club como Lewandowski, Raphinha, Pau Cubarsí y Marc Casadó, además de influencers como TheGrefg y artistas como Quevedo. Sin embargo, lo que ocurrió durante el evento provocó el repudio inmediato de la Asociación de Personas con Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas con Enanismo (ADEE), que difundió un duro comunicado en redes sociales.
El comunicado que desató la polémica
A través de la red social X, la organización expresó su profunda indignación por lo ocurrido durante la fiesta. “La Asociación de Personas con Acondroplasia y Otras Displasias Esqueléticas con Enanismo denuncia la contratación de personas con enanismo como entretenimiento en la fiesta de Lamine Yamal. Actuaremos por la vía legal y social”, afirmaron, abriendo un debate de enorme alcance público.
La publicación rápidamente se viralizó, superando los dos millones de visualizaciones y cosechando más de 10 mil interacciones, lo que dejó en evidencia la repercusión social del caso. Más tarde, la misma organización volvió a manifestarse: “Gracias a los RT, mensajes y muestras de apoyo que estamos recibiendo tras nuestra denuncia. La acogida y el compromiso de tantas personas nos animan a seguir defendiendo la dignidad, los derechos y la inclusión”, escribieron.
Denuncia, visibilidad y responsabilidad social
La crítica central se basa en el uso de personas con enanismo como forma de entretenimiento, una práctica que diversas organizaciones internacionales consideran denigrante y cosificadora. La contratación de este tipo de espectáculos en fiestas privadas ya ha sido ampliamente rechazada en varios países, señalada como una forma de explotación que perpetúa estigmas.
El impacto de la denuncia se ve amplificado por el nivel de exposición de Yamal, una figura cada vez más central en el proyecto futbolístico del Barça y de la selección española. Con solo 18 años, su vida ya transcurre bajo el ojo público, y cualquier paso en falso tiene consecuencias directas en su imagen y carrera.
El escándalo no termina y la justicia podría intervenir
Desde la ADEE ya confirmaron que su intención es avanzar tanto por la vía legal como por la social, aunque no detallaron los pasos concretos que seguirán. La organización ha sido una voz activa en la lucha contra la discriminación, y esta denuncia representa, según indicaron, un nuevo llamado de atención sobre prácticas normalizadas que vulneran derechos.
Mientras tanto, Lamine Yamal continúa entrenando con el plantel de Barcelona, enfocado en el arranque de la temporada. Sin embargo, el revuelo generado por la denuncia podría seguir creciendo en las próximas horas, poniendo presión sobre el entorno del jugador y sobre el club.
Una polémica que excede el fútbol
Este episodio expone una discusión mucho más profunda: ¿qué lugar ocupa hoy el respeto hacia las personas con discapacidad en los espacios públicos y privados? La fiesta que debía marcar la entrada de Yamal a la adultez, terminó cuestionada por reproducir prácticas que diversas organizaciones vienen denunciando desde hace años. El debate está planteado.