Las tasas de interés volvieron al centro de la escena financiera en la Argentina, luego de que el Gobierno nacional impulsara un conjunto de medidas para frenar la dolarización de carteras. La decisión del ministro de Economía, Luis Caputo, de ajustar el sendero de tasas provocó un inmediato reacomodamiento de las principales billeteras virtuales y plataformas fintech, que reaccionaron con subas para captar usuarios y resguardar ahorros frente a la inflación.
El dato de inflación de julio fue del 1,9% según el INDEC. Y aunque la cifra mostró una desaceleración clara respecto de los picos previos, el rendimiento real de los instrumentos en pesos sigue siendo clave para el público que busca evitar la pérdida de poder adquisitivo. En ese contexto, las billeteras digitales comenzaron a ofrecer tasas nominales anuales (TNA) que logran igualar o superar ese porcentaje en términos mensuales, lo que convierte a las cuentas remuneradas y fondos comunes de inversión (FCI) en una herramienta cada vez más competitiva frente al clásico plazo fijo bancario.
Qué tasas ofrecen las billeteras digitales
Según el relevamiento de mitad de agosto, estas son las TNA que ofrecen las principales plataformas digitales:
- Fiwind: 35% (hasta $750.000)
- Cocos (FCI RM): 31,97%
- Prex Argentina (FCI MM): 31,46%
- Personal Pay (FCI MM): 31,43%
- Mercado Pago: 30,5%
- Ualá (Cuenta Remunerada): 30% (hasta $1.500.000)
- Claro Pay (FCI MM): 30,33%
- Naranja X: 29% (hasta $800.000)
- Brubank: 28% (hasta $750.000)
- Lemon Cash (FCI MM): 27,53%
En todos los casos, se trata de rendimientos nominales anuales. Traducido a retornos mensuales, muchas de estas opciones alcanzan o superan el 2%, es decir, por encima de la inflación de julio. A esto se suma la posibilidad de retirar fondos de forma inmediata (en el caso de las cuentas remuneradas) o dentro de las 24/48 horas (en los FCI Money Market), lo que brinda una flexibilidad que no ofrece el plazo fijo tradicional.
Qué pasa con los plazos fijos
Al mismo tiempo, los principales bancos del país siguen ofreciendo tasas más elevadas en términos anuales: el Banco Nación, por ejemplo, mantiene una TNA del 44%. Sin embargo, estas colocaciones requieren inmovilizar el dinero por al menos 30 días y no permiten el retiro anticipado, lo que reduce su atractivo para los usuarios que priorizan la liquidez o prevén movimientos en el mercado.
Por eso, si bien el plazo fijo sigue siendo útil para quienes buscan previsibilidad y bajo riesgo, las billeteras virtuales ganan terreno como opción más flexible. Además, muchas apps fijan topes a los saldos sobre los que pagan intereses. Lo que lleva a algunos usuarios a fraccionar su dinero en más de una aplicación para maximizar el rendimiento.
El objetivo de Caputo: más ahorro en pesos
La nueva estrategia del Gobierno busca contener la presión sobre el dólar incentivando el uso de instrumentos en moneda local. Tras el salto del tipo de cambio en julio (+13%), las autoridades reforzaron las señales para evitar un traslado pleno a precios. La suba de tasas apunta a recomponer el atractivo de ahorrar en pesos. Especialmente, en un momento donde la estabilidad nominal es vista como una condición clave para sostener la recuperación económica.
El objetivo de Caputo es evitar una nueva corrida. Con especial cuidado en la antesala de las elecciones de septiembre, y consolidar el sendero de baja inflacionaria sin descuidar la demanda de dinero. En este marco, las billeteras digitales cumplen un rol central como instrumento de contención. Retienen depósitos, ofrecen liquidez, compiten con la banca tradicional y colaboran con el equilibrio financiero.