Cristina Kirchner apeló este viernes la decisión de la Cámara de Casación que confirmó la continuidad de las medidas restrictivas impuestas durante su prisión domiciliaria. La expresidenta deberá seguir utilizando una tobillera electrónica y mantener limitaciones en las visitas que recibe en su domicilio de San José 1111, en el barrio porteño de Constitución. La última instancia para revertir estos criterios será la Corte Suprema de Justicia, el mismo tribunal que confirmó la sentencia condenatoria que llevó a la exmandataria a cumplir seis años de prisión por administración fraudulenta en perjuicio del Estado.
La Sala IV de la Cámara de Casación Federal confirmó por voto mayoritario las medidas restrictivas que había impuesto el Tribunal Oral Federal 2 para el cumplimiento de la condena por corrupción en el caso Vialidad. Estas restricciones incluyen el uso obligatorio de la tobillera electrónica y la autorización previa del juez Jorge Gorini, quien ejecuta la pena, para recibir visitas de personas que no estén incluidas en el listado previamente avalado por el TOF 2. Este listado comprende familiares, médicos, abogados y custodios, al que la defensa logró sumar contadores y apoderados.
Los jueces Mariano Borinsky, Diego Barroetaveña y Gustavo Hornos se manifestaron de manera unánime respecto al pedido que había formulado el fiscal general Mario Villar para que el arresto domiciliario se cumpliera en otra propiedad diferente a San José 1111. El tribunal tomó en consideración que el tribunal oral se había valido de un informe socio-ambiental favorable elaborado por la Dirección de Control y Asistencia de Ejecución Penal para fijar el domicilio actual como lugar de cumplimiento de la condena.
Situación del barrio y decisión judicial
Los magistrados remarcaron que habían cesado las situaciones que afectaron al barrio en momentos posteriores al 10 de junio, fecha en la que la Corte Suprema confirmó la condena de la ex presidenta. Esta consideración resultó determinante para mantener el domicilio actual como lugar de cumplimiento de la prisión domiciliaria, rechazando así el pedido fiscal de cambio de ubicación.
La defensa de Cristina Kirchner, encabezada por el abogado Carlos Beraldi, presentó este viernes el recurso extraordinario ante la Corte Suprema de Justicia con el objetivo de revertir las restricciones impuestas. Esta instancia representa la última oportunidad procesal para modificar las condiciones actuales del cumplimiento de la pena, que incluyen tanto el uso de dispositivos de control electrónico como las limitaciones en el régimen de visitas.
El caso tiene particular relevancia institucional, ya que involucra a una ex presidenta de la Nación en cumplimiento de una condena por corrupción, estableciendo precedentes importantes en materia de ejecución penal para funcionarios de alto rango. La decisión final de la Corte Suprema será determinante no solo para definir las condiciones específicas del cumplimiento de la pena de Kirchner, sino también para establecer criterios jurisprudenciales en casos similares que puedan presentarse en el futuro.