semanas tras varias rupturas amorosas. Recientemente, Ale Sergi, vocalista de Miranda! y coach en La Voz Argentina 2025 y la DJ cordobesa Cintia Bustamante anunciaron el fin de su relación, que se extendió por una década.
El anuncio lo hizo Ángel de Brito en LAM y destacó lo sorpresivo del desenlace para quienes los veían como una pareja estable y alejada de exposiciones públicas.
La ruptura de Ale Sergi y Cintia Bustamante según fuentes cercanas, se dio por el desgaste que acumulaban a lo largo de los años, una tensión propia de parejas que forjan una conexión profunda pero enfrentan las dificultades cotidianas y las exigencias de la vida artística como las diferencias de las agendas y otros compromisos laborales.
Lo particular es que, a pesar de haber compartido una vida sentimental extensa, Ale Sergi y Cintia nunca convivieron oficialmente; solo tenían un gato en común, símbolo de un vínculo emocional muy fuerte, pero a la vez independiente y que otros no suelen entender su significado.
Lo cierto es que ambos mantuvieron un perfil público relajado, evitando la confrontación mediática. Por lo que la noticia de su separación cayó sin advertencia y los últimos episodios muestran cómo incluso las relaciones más sólidas pueden fracturarse por el paso del tiempo, aunado a las responsabilidades personales y profesionales.
Pese a la distancia emocional que pudo crecer, no circulan rumores de terceros involucrados, información que fue puesta sobre la mesa por el periodista Ángel de Brito en LAM. Por lo que vuelve a saltar el tema del desgaste como la razón principal, sin acusaciones ni dramatismos.
La ruptura también abre otra mirada: cuán difícil puede ser sostener un vínculo en la vida pública cuando ambos están en el centro de la música y el espectáculo. El caso de Ale Sergi y Cintia sirve como un ejemplo de que detrás de las luces y los escenarios a veces suele ser complejo mantener una relación amorosa en paralelo.
Ante el rompomiento de la pareja, en la opinión pública resurgieron comentarios sobre el cantante y su identidad sexual, a lo que respondió:
“La verdad es que no soy gay. Por alguna razón a mí siempre me gustó Prince, The Cure, pintarme los ojos, bailar medio loco, elegirme la ropa, cantar, y encima tengo la voz aguda… y no me gusta jugar al fútbol. No es de ahora que alguien me pregunte si soy gay: me pasa de toda la vida”.
