A pocos días de comenzar los octavos de final de la Copa Libertadores ante Libertad, River atraviesa un momento clave no solo en lo futbolístico, sino también en lo médico. El equipo de Marcelo Gallardo mantiene la ilusión de seguir firme en el Torneo Clausura, pero las lesiones han golpeado fuerte al plantel y el DT aguarda por la evolución de varios de sus futbolistas.
Las buenas noticias podrían llegar con el regreso de Paulo Díaz, quien sufrió una inflamación en la rodilla y ya trabaja para estar disponible. También se espera la vuelta de Sebastián Driussi, que arrastra un esguince severo de tobillo desde mediados de junio. Aunque hay optimismo, el cuerpo técnico no lo arriesgará si no está en plenitud, lo que podría retrasar su reaparición hasta el encuentro frente a Godoy Cruz.
Bajas confirmadas para la ida de Libertadores
En cambio, la realidad es distinta para Lucas Martínez Quarta y Maximiliano Salas. Ambos padecen esguinces en sus rodillas y están descartados no solo para el cruce con Libertad, sino también para el compromiso del fin de semana ante Godoy Cruz. Si la recuperación avanza sin contratiempos, podrían volver recién en la revancha copera, el 21 de agosto.
Recuperaciones que van para largo
La situación de Maxi Meza y Agustín Ruberto obliga a mirar más allá en el calendario. El mediocampista fue operado de una tendinopatía rotuliana y apunta a regresar en octubre. En ese mismo mes podría recibir el alta Ruberto, quien desde febrero se rehabilita de una rotura de ligamentos sufrida mientras defendía a la Selección Sub 20.
La lesión más grave: Pezzella, baja prolongada
El caso más preocupante es el de Germán Pezzella. Los estudios confirmaron la rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla, lesión que lo mantendrá fuera entre siete y ocho meses. El campeón del mundo recién podría reaparecer en marzo o abril de 2026, perdiéndose gran parte de la temporada.
Con este panorama, Gallardo deberá afinar la estrategia para suplir las ausencias y decidir si apura regresos para el duelo contra Libertad o reserva piezas pensando en la revancha y en el tramo final del Clausura. Lo único seguro es que el cuerpo técnico medirá cada paso para no poner en riesgo la salud de sus jugadores en plena definición de la temporada.
