Con el cronograma electoral en marcha, el oficialismo nacional se enfrenta a un dilema: cómo combinar una posible estrategia de candidaturas con la continuidad de la gestión. Con menos de 20 días para oficializar las listas, Karina Milei ya puso sobre la mesa varios nombres del Gabinete para encabezar boletas en distintos distritos. El movimiento, aunque no definitivo, obligaría a una reorganización interna en áreas sensibles del Poder Ejecutivo.
La ingeniera del armado electoral de La Libertad Avanza (LLA) fue quien impulsó la postulación de Manuel Adorni en la Ciudad, jugada que terminó con un amplio triunfo sobre el PRO. Esa lógica de aprovechar figuras del Ejecutivo con alta visibilidad se repetiría para los comicios legislativos de octubre.
Bullrich, la ministra con más chances
Dentro del Gabinete, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, es quien más cerca está de aceptar su candidatura. La funcionaria suena como cabeza de lista al Senado por la Ciudad de Buenos Aires, distrito donde goza de buena imagen pública y mantiene un electorado propio. Incluso si el oficialismo concreta un acuerdo con el PRO porteño, el nombre de Bullrich seguiría en carrera.
En recientes declaraciones televisivas, la ministra criticó las candidaturas testimoniales, aunque sin referirse a su situación particular. «Hacerse concejal siendo intendente es un fraude total», sentenció, en lo que muchos interpretaron como una señal de que, si acepta, será para competir en serio. De prosperar su postulación, Bullrich ya dejó trascender que su reemplazo no sería un dirigente del PRO, sino alguien de su entorno directo: suena fuerte Alejandra Monteoliva, actual secretaria de Seguridad Nacional.
Petri en duda y Francos resiste
Otro nombre que surgió en el radar electoral es el del ministro de Defensa, Luis Petri. Excompañero de fórmula de Bullrich en 2023, el mendocino viajó recientemente a su provincia natal para mantener reuniones con referentes locales de LLA y de la estructura que lidera el gobernador radical Alfredo Cornejo.
Sin embargo, en su entorno aseguran que su participación no está confirmada. Karina Milei le habría ofrecido el cuarto lugar en la lista, detrás de candidatos definidos por el ala presidencial y el sector de Cornejo. De aceptar, el Gobierno ya evalúa reemplazantes. Uno de los mencionados es el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, aunque de momento todo sigue en el terreno de las especulaciones.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, también fue tentado para acompañar a Bullrich como candidato al Senado, pero rechazó de forma categórica la posibilidad. «Ser candidato a esta altura no es algo que me enamore», expresó en declaraciones públicas, al tiempo que reafirmó su intención de continuar colaborando con la gestión nacional.
Otros nombres y una incógnita en Tucumán
En paralelo, desde LLA barajaron el nombre de Lisandro Catalán, actual vicejefe de Gabinete del Interior, como opción para encabezar la lista en Tucumán. A pesar de su rol como titular del espacio libertario en la provincia, sus niveles de conocimiento y adhesión resultaron insuficientes, por lo que la idea fue descartada.
Otro de los nombres que asomó en el escenario político fue el de Sandra Pettovello, ministra de Capital Humano. Aunque atravesó varios cambios internos en su cartera, hoy se encuentra en una etapa de estabilidad. Desde su entorno aseguraron que no está pensando en una candidatura y que se mantiene enfocada en la gestión.
Alianzas locales y definiciones inminentes
El plazo para inscribir alianzas vence este jueves y desde el oficialismo confirmaron que mantienen negociaciones con oficialismos provinciales en distintas jurisdicciones. La presentación de las listas, en tanto, se conocerá antes del 11 de agosto, cuando vence el límite formal.
Si bien las definiciones aún no están cerradas, la estrategia de Karina Milei apunta a dos objetivos simultáneos: consolidar el capital político propio y reorganizar la gestión para preservar el control sobre áreas clave del Gabinete, evitando filtraciones o figuras ajenas a la mesa chica presidencial.