En la nómina de 30 futbolistas candidatos al Balón de Oro 2025 aparecen dos nombres argentinos: Lautaro Martínez del Inter y Alexis Mac Allister del Liverpool. Ambos han sido clave para sus equipos en la última temporada, pero lo que más ha llamado la atención es la enorme distancia que separa sus salarios anuales.
Los números detrás de cada estrella
Datos de portales especializados indican que Lautaro Martínez percibe alrededor de 19,2 millones de dólares por temporada, lo que lo convierte en el jugador mejor pagado de todo el plantel neroazzurro. Su contrato lo ubica muy por encima de figuras como Nicolò Barella, que recibe unos 13,8 millones anuales.
Por su parte, Alexis Mac Allister tiene un sueldo de 10,3 millones de dólares al año, cifra que lo coloca entre los ocho mejor remunerados del Liverpool. En Anfield, solamente estrellas como Mohamed Salah, Virgil van Dijk o Florian Wirtz superan sus ingresos.
Una diferencia que genera debate
La brecha de casi nueve millones de dólares entre ambos refleja el peso que cada uno tiene en su club. Lautaro es capitán, referencia ofensiva y pieza central en los planes del Inter, mientras que Mac Allister, aunque muy valorado, comparte protagonismo con varias figuras en la Premier League.
En Italia, los contratos millonarios suelen concentrarse en pocas estrellas, y el Inter ha decidido hacer de Lautaro el eje de su proyecto. En cambio, en la Premier, el reparto de salarios es más amplio y competitivo, lo que influye en la posición de Mac Allister dentro de la escala interna.
El contexto del Balón de Oro
A pesar de la diferencia económica, los dos están en igualdad de condiciones para pelear por el galardón más importante del fútbol individual. Sus actuaciones en la cancha, y no sus contratos, serán las que pesen en la votación final.
El Balón de Oro 2025 se entregará el lunes 22 de septiembre en el Théâtre du Châtelet de París, en una ceremonia que reunirá a las máximas figuras del fútbol mundial. Hasta entonces, tanto Lautaro como Mac Allister buscarán seguir sumando méritos, cada uno desde su realidad económica y deportiva.
