A su regreso de México —donde inició las grabaciones de la nueva temporada de Love is Blind para Netflix— Wanda Nara fue abordada por la prensa en Ezeiza y no evitó referirse a la creciente tensión legal con Mauro Icardi por la custodia de Francesca e Isabella. Así como de L-Gante, su expareja sentimental.
Desde Turquía, Mauro Icardi abrió la posibilidad de iniciar una restitución internacional para que las niñas puedan viajar, una medida que Wanda enfrenta con determinación. Ante esta idea, la empresaria aseguró que no teme: sus hijas están bien establecidas en Argentina y ya cursan su segundo año escolar.
“Mis hijos están instalados en el país… Va a suceder cuando él también permita que mis hijas viajen conmigo”, afirmó Wanda. Aseguró haber ofrecido más de veinte destinos para que las niñas pudieran trasladarse, incluso uno que está a solo 20 o 25 minutos de su ubicación actual.
En torno a las garantías legales, Wanda explicó que el pedido de restitución internacional impide el regreso inmediato de sus hijas a Argentina. Sin esas garantías, por ahora no pueden ingresar al país.
Lejos de amedrentar, la famosa respondió con firmeza a quienes la interrogaron sobre si teme la estrategia legal de Icardi: “No tengo miedo. Mis hijos están instalados… y están todos los hermanitos que nunca fueron separados aquí”, aseguró ante los medios de comunicación.
Es de mencionar que el conflicto entre Wanda Nara y Mauro Icardi refleja una disputa alerta por la custodia de sus hijas, donde la mediática continúa defendiendo su lugar como madre protectora, en simultáneo con su vida y proyectos laborales en el país.
Asimismo, la mediática también fue abordada por su relación con L-Gante y no titubeó en decir que “nunca lo verán hablando mal de él” porque “le tengo mucho aprecio”.
Vale decir que sus declaraciones vinieron luego que el intérprete de “Antes que te vaya” se sincerara ante la prensa alegando que Wanda fue “sola una amiga” y que ahora está decidido a recuperar su familia: a Tamara Báez, la madre de su hija Jamaica.
