No hay dudas de que Intrusos, el ciclo conducido por Adrián Pallares y Rodrigo Lussich para América TV, es uno de los programas más importantes de la pantalla chica. No solo sorprenden semana a semana con toda la información de lo que sucede en el mundo del espectáculo, sino que además sorprenden con fuertes testimonios.
En esta oportunidad hablaron con un polémico personaje, y es que se trata de una de las amantes de Roberto García Moritán. Si bien el político negó haberle sido infiel a Pampita, lo cual habría llevado a su separación a principios de este año, Araceli Salto se animó a dar todos los detalles del vínculo que mantuvo con el expolítico.
Sin pelos en la lengua, Araceli Salto le habló directamente a Pampita. Firme, lanzó: “No creo que exista algo para que Pampita me perdone. Nada más me queda hacerme cargo”. “Estoy cansada de tener gente detrás con estos temas, y yo ocultándome. En su momento dejé que todo pasara y me escondí porque si salía a hablar, me iban a destruir”, manifestó.
Lejos de callarse, Araceli reveló que previó a presentarse en la televisión para dar su testimonio, Roberto García Moritán intentó comprar su silencio. Y es que el político negó fervientemente haberle sido infiel a Pampita, pese a las versiones que circulaban. “Me ofreció trabajo para que no hable», confesó la supuesta amante del empresario.
También se animó a dar a conocer la última conversación que tuvo con Roberto García Moritán, que parece no querer hacerse cargo de las infidelidades que cometió. “Él dice que yo soy la culpable de su separación, de todo lo que le había pasado. Yo me puse firme y le dije que los culpables somos los dos. Mi mundo se vino abajo”, afirmó Araceli.
Qué contó en LAM
Fue en el programa de Ángel de Brito donde Araceli dio a conocer cómo inició su relación: “Nos conocimos por Instagram. Yo estuve en pareja ocho años en mi pueblo, en Chaco. Me había separado. Empezamos a hablar, durante un año casi. Yo lo admiraba mucho. Imaginate, yo de un pueblito. Hablaba con alguien que lo veía como un superhéroe. Él todavía no era político. Un mes después que yo lo conozco él se casa con Pampita».
«Nos empezamos a ver, empezó como un juego que terminó siendo morbo, sexo y un vínculo. Yo hace muy poco empecé a entender y a ver esa parte que yo no veía de él, tenía una venda y que decía Robert, mi superhéroe, que yo siempre lo admiré. Ese es el lado tan egoísta que tiene, que es fulminante. Muy egoísta, primero está él, no importa el resto. Tiene metas. Y tiene una imagen que cuidar. Yo no quería aceptar que me había enamorado», agregó.
