Daniel Osvaldo volvió a ocupar titulares. El exfutbolista fue visto en compañía de su novia, Malena, durante una salida que terminó en un altercado en el estacionamiento de un supermercado de Banfield. El hecho dejó en evidencia el carácter explosivo del exdelantero y puso a la pareja en el centro de la escena mediática.
Aunque su perfil es privado, las imágenes compartidas junto al exjugador revelan una conexión afectiva que ya lleva varias semanas. Durante el programa Puro Show de El Trece, los panelistas lanzaron una picante frase: «¿Quién es la nueva víctima de Osvaldo?» por lo que revelaron todos los detalles en la emisión.
La relación entre Osvaldo y Malena se oficializó recientemente a través de redes sociales. Ella es una joven que se caracteriza por ser una emprendedora de 24 años, se dedica al estilismo y a la creación de rastas y mantiene una presencia activa en plataformas como Instagram y TikTok.
Ahora bien, ell incidente ocurrió durante una de las primeras apariciones públicas de la pareja. Según testigos, Osvaldo protagonizó una discusión con otro hombre en el estacionamiento del supermercado. Y aunque no se registraron agresiones físicas, el episodio generó incomodidad entre los presentes. El hombre involucrado sería Tomy Pelazo, exnovio de Malena y sobrino del músico Piti Fernández.
Este cruce inesperado entre pasado y presente sentimental no pasó desapercibido. La historia de Malena con Pelazo habría terminado en 2024, y desde entonces, varios amigos del entorno dejaron de seguirla en redes, lo que alimentó especulaciones sobre la dinámica de esa ruptura.
La exposición mediática de Osvaldo no es nueva. Su historial amoroso, que incluye una relación de cuatro años con Giannina Maradona, ha sido objeto de atención constante. La reciente separación con ella, ocurrida a fines de mayo, dejó espacio para nuevas especulaciones, y la aparición de Malena en su vida reavivó el interés del público y la prensa.
Más allá del escándalo, la pareja parece decidida a continuar su camino. Las publicaciones en redes muestran gestos de cariño y complicidad, mientras que Malena sigue desarrollando su emprendimiento con entusiasmo. El episodio en Banfield, aunque incómodo, podría quedar como una anécdota más en la vida de Osvaldo, marcada por pasiones intensas.