El secretario de la Secretaría de la Pequeña y Mediana Empresa (PYME), Marcos Ayerra, presentó su renuncia y el Gobierno decidió cerrar esa dependencia, según confirmaron fuentes oficiales. La salida del funcionario responde a “cuestiones personales”, pero la medida generó preocupación en el sector, que atraviesa una crisis por un contexto económico muy complicado.
Las tareas relacionadas con las pymes quedarán a cargo de Pablo Lavigne
Él lidera el área de Coordinación Productiva del Ministerio de Economía. Desde el Ejecutivo aseguran que no dejarán de lado al sector. Sin embargo, algunos empresarios creen que el tema puede perder peso entre otras prioridades.
Dirigentes dicen que con la salida del secretario, el sector pierde un contacto directo con el Gobierno. “Era una forma de plantear problemas y buscar respuestas”, dijeron. Aunque valoran la experiencia de Lavigne, temen que las pymes queden en segundo plano.
Alerta por la situación y la falta de crédito
La Unión Industrial Argentina (UIA) expresó su preocupación por la caída de la actividad y la subida de costos. En su último comunicado, pidió que las tasas de interés se mantengan estables. También exigió más crédito para las pymes industriales, que son clave para mantener el empleo y la producción.
En la misma línea, Leo Bilanski, presidente de la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC), dijo que cada día cierran 40 pymes en Argentina. Esto significa la pérdida de cerca de 500 empleos diarios. En total, se cerraron 15 mil empresas en menos de dos años.
Funcionarios que se van y un sector sin apoyo claro
La renuncia del secretario pyme es parte de una lista larga. Más de cien funcionarios dejaron el Gobierno de Javier Milei desde el cambio de gestión. Desde el Ejecutivo admiten que es difícil mantener a personal técnico. Los sueldos siguen congelados y las tensiones internas crecen.
Para empresarios, el cierre de la Secretaría Pyme es una mala señal. Ven falta de interés por un sector clave para la economía. Sin un área específica, las pequeñas y medianas empresas quedan más vulnerables. Necesitan apoyo justo en un momento difícil.