A raíz de dos fallidas negociaciones el gremio ferroviario La Fraternidad, el Gobierno Nacional decidió dictar la conciliación obligatoria y normalizar temporalmente el servicio de trenes en la zona metropolitana de Buenos Aires. El gremio había ordenado limitar la velocidad de los trenes a 30 kilómetros por hora para presionar al Gobierno Nacional a que intervenga por el mal estado de la estructura ferroviaria.
A través de la Secretaría de Trabajo, comandada por Julio Cordero y bajo el ala del Ministerio de Capital Humano, el gobierno de Javier Milei negoció con La Fraternidad en dos oportunidades durante el jueves 25, una reunión por la mañana y otra durante la tarde. Sin embargo, no llegaron a un acuerdo y el Gobierno intimó al sindicato dirigido por Omar Maturano, por lo que el servicio se normalizará por 15 días comenzando el viernes.
Comunicado oficial. pic.twitter.com/bLBMB9hPvl
— Ministerio de Capital Humano (@MinCapHum_Ar) September 25, 2025
Los problemas provocados por La Fraternidad
Según la Secretaría de Trabajo, la medida afectó a «más de un millón de usuarios» que tardaron el doble de tiempo en llegar a sus destinos comparado con un día habitual. En las reuniones participaron además representantes de las empresas Operadora Ferroviaria S.A, Metrovías S.A y Ferrovías S.A Concesionaria.
«Ante lo expuesto por la empresa Trenes Argentinos sobre la inversión en obras y acciones prioritarias y urgentes que contempla en su plan de ejecución, el titular del gremio de trenes La Fraternidad, Omar Maturano, decidió retirarse de la mesa y cortar la negociación de forma intempestiva, abandonando cualquier posibilidad de diálogo y entendimiento», denunciaron desde la cartera de Trabajo.
Entre el miércoles y el jueves, La Fraternidad impulsó un paro en las líneas Roca, Mitre, Belgrano Sur, San Martín, Sarmiento y Urquiza, limitando su velocidad de circulación. El paro técnico provocó alteraciones en los horarios habituales y derivó en una acumulación inusual de personas en los andenes. Ante la baja velocidad del transporte, muchos de sus usuarios reaccionaron bajándose de las formaciones y caminando por las vías.
Desde La Fraternidad denunciaron la ausencia de propuestas en las discusiones salariales, así como bajos ingresos para los trabajadores en distintas líneas y problemas de diagramación e itinerarios, a los cuales tildaron de «desastrosos y sin apertura a sugerencias«.