En un domingo sin operaciones tradicionales, las miradas de los mercados financieros se volcaron al dólar cripto, el único que nunca descansa y que opera las 24 horas del día, los siete días de la semana. Pasado el mediodía, las principales stablecoins —USDT y USDC— se ubicaban en $1.388 y $1.383 respectivamente, con leves variaciones negativas de 0,08% y 0,05% en las últimas 24 horas.
La cotización funciona como un termómetro del ánimo financiero en medio de la elección legislativa bonaerense, que se convirtió en un test decisivo tanto para el gobernador Axel Kicillof como para el presidente Javier Milei, cuya gestión enfrenta denuncias de corrupción y tensiones en los mercados.
El rol del dólar cripto como termómetro
Aunque más pequeño y volátil que el mercado cambiario tradicional, el dólar cripto tiene un peso creciente en la Argentina. Según datos de Bitso, el 16% de las carteras promedio de los usuarios locales está compuesto por stablecoins, frente al 12% en Colombia y el 8% en Brasil. El USDT domina el panorama con el 78% de las compras, seguido por el USDC con un 7%.
Estos números reflejan que, en un contexto de inflación persistente y expectativa de devaluación, los argentinos se vuelcan cada vez más al “dólar que nunca duerme” como refugio de valor y alternativa de ahorro.
La tensión cambiaria de la última semana
La calma de hoy contrasta con una semana de alta tensión en la que el Gobierno decidió apartarse de la regla de flotación entre bandas. Y habilitó al Tesoro a vender divisas directamente en el mercado. El movimiento buscó transmitir control, pero también abrió interrogantes sobre la consistencia del esquema cambiario. Especialmente, en medio de reservas frágiles y una demanda estructural de dólares.
En ese contexto, el dólar cripto se volvió clave como señal adelantada. Si sube con fuerza en medio del escrutinio, los operadores leerán que se avecina una mayor presión cambiaria. Si se mantiene estable, reforzará la idea de que el mercado espera un resultado electoral contenido.
Los escenarios que anticipan los bancos
Un informe de JP Morgan, citado en la City porteña, definió dos escenarios tras los comicios bonaerenses:
- Escenario base: una ajustada victoria de Fuerza Patria por menos de 5 puntos o un triunfo de La Libertad Avanza. En ese caso, el dólar podría mantenerse estable e incluso bajar antes de las elecciones nacionales de octubre.
- Escenario adverso: un triunfo kirchnerista con más de cinco puntos de diferencia. Allí, el tipo de cambio podría subir hasta el límite superior de la banda cambiaria. En torno a los $1.460, lo que reavivaría la presión inflacionaria y la incertidumbre política.
La consultora Capital Economics coincidió en que la acumulación de reservas y la estabilidad del tipo de cambio real serán determinantes. Especialmente, para sostener la confianza del mercado, mientras que LCG proyectó que tras los comicios será inevitable recalibrar el esquema.
Expectativa hasta el escrutinio
Con el 40% del electorado nacional concentrado en la provincia de Buenos Aires, el resultado de este domingo no solo definirá el equilibrio legislativo local, sino que marcará el pulso económico de los próximos meses.
Mientras tanto, el dólar cripto, ese que nunca duerme, seguirá siendo el reflejo más inmediato del ánimo financiero de un país que espera con cautela el veredicto de las urnas.