La Selección de Venezuela estuvo en el centro de una controversia que llegó a poner en duda su participación en las Eliminatorias Sudamericanas. Las acusaciones de la Federación Boliviana de Fútbol, que hablaban de trabas logísticas en la visita a Caracas, encendieron especulaciones sobre una posible expulsión de la Vinotinto del camino al Mundial. Finalmente, la FIFA dio su veredicto y trajo tranquilidad.
El reclamo boliviano giraba en torno a supuestas demoras intencionales en vuelos, transporte interno y organización. Desde La Paz hablaban de sabotaje, lo que llevó al máximo ente del fútbol mundial a abrir un expediente y recopilar pruebas antes de emitir un fallo definitivo.
“No hubo malicia”: la conclusión de FIFA
Fuentes cercanas al organismo confirmaron que “no se configuró una violación intencional al reglamento” y que los inconvenientes fueron consecuencia de factores “fortuitos y ajenos” a la responsabilidad de la federación venezolana. En consecuencia, no se aplicarán sanciones de ningún tipo: ni quita de puntos, ni multas, ni suspensión.
La resolución significa un espaldarazo clave para el proyecto de Fernando Batista, que podrá seguir adelante con el sueño de meter a Venezuela en su primer Mundial de mayores sin sobresaltos administrativos.
Conmebol cerró filas y respaldó el fallo
Lejos de conformarse con la decisión de FIFA, la federación boliviana intentó una segunda vía con un reclamo ante la Conmebol. Sin embargo, el ente sudamericano fue categórico: respaldó el veredicto internacional y desestimó cualquier tipo de sanción.
En un comunicado interno, se clasificaron las anomalías denunciadas como “incidentes operativos sin trascendencia disciplinaria”, cerrando así definitivamente el expediente y despejando el panorama para la Vinotinto.
Venezuela vuelve a enfocarse en el objetivo
Con la tormenta disipándose, Venezuela puede volver a concentrarse en lo que realmente importa: sumar puntos en la tabla. Tras la victoria 2-0 contra Bolivia, el equipo se mantiene en la pelea directa por la clasificación o el repechaje. Figuras como Salomón Rondón y Yeferson Soteldo lideran un plantel que combina experiencia y juventud.
La ilusión de jugar el Mundial 2026 en Estados Unidos, México y Canadá está más viva que nunca. Por primera vez en mucho tiempo, la Vinotinto no solo sueña: también compite. Y con el respaldo de FIFA y Conmebol, sabe que el camino hacia la gran cita dependerá exclusivamente de lo que haga dentro de la cancha.