La Copa Libertadores ya entra en su etapa decisiva y en el Estadio Monumental se viene un cruce de alto voltaje contra Palmeiras por los cuartos de final. En la previa, Marcelo Gallardo sorprendió con una decisión que generó impacto: River aprovechó un vacío reglamentario para incluir un futbolista más en la lista de buena fe.
El reglamento habilitaba a realizar tres cambios, pero River encontró la forma de ingresar a tres jugadores quitando solo a dos. La maniobra le permitió al equipo de Núñez ampliar sus variantes y encarar el duelo frente al conjunto brasileño con un plantel más reforzado de lo que se esperaba.
Los ingresos y las salidas en la lista
Entre las novedades aparecen Lautaro Rivero, quien regresó en el último mercado de pases, y los juveniles Juan Cruz Meza y Juan Bautista Dadín, dos promesas que ya empiezan a ganar lugar en la consideración del cuerpo técnico.
En contrapartida, los que dejaron su lugar fueron Santiago Simón, transferido al Toluca de México, y Franco Mastantuono, que ya se marchó al Real Madrid pero todavía figuraba en la nómina de octavos.
El vacío legal que jugó a favor
Lo curioso es que River pudo sumar un tercer nombre sin necesidad de dar otra baja. Esto fue posible porque en la fase anterior había quitado siete jugadores de la nómina, lo que dejó un cupo abierto. Así, Meza ocupará el lugar de uno de los reemplazos pendientes, completando el cupo disponible.
De aquella vez quedaron afuera futbolistas como Manuel Lanzini, Matías Rojas, Matías Kranevitter, Gonzalo Tapia y Leandro González Pírez, además de Rodrigo Aliendro y el arquero Lucas Lavagnino. Esa maniobra ahora le permitió al club sumar un nombre más en la recta final del certamen continental.
La lista de River para los cuartos de final
Con estas modificaciones, el plantel quedó integrado por figuras como Franco Armani, Gonzalo Montiel, Germán Pezzella, Miguel Borja, Juan Fernando Quintero, Sebastián Driussi y Milton Casco, además de los refuerzos y juveniles que buscan tener minutos.
La apuesta del cuerpo técnico es clara: aprovechar cada resquicio reglamentario para llegar con la mayor cantidad de variantes posibles al cruce frente a Palmeiras. La maniobra no solo refuerza la lista, sino que demuestra que River piensa en todos los detalles de cara a un partido que puede marcar su destino en esta Libertadores.
