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POLÍTICA

Gobierno bonaerense contra Javier Milei: fuertes críticas a los vetos presidenciales

 

El ministro de Gobierno de PBA, Carlos Bianco, afirmó que Milei “es un mandatario constitucional, no un emperador ni un pequeño dictador”

 
Carlos Bianco
Carlos Bianco afirmó que las elecciones PBA se desarrollaron con normalidad y que los primeros resultados oficiales se conocerán desde el 30% de mesas escrutadas.

El Gobierno bonaerense volvió a tensionar la relación con la Casa Rosada y lanzó duras críticas contra el presidente Javier Milei por los recientes vetos del Poder Ejecutivo. En ese sentido, el ministro de Gobierno, Carlos Bianco, afirmó que Milei “es un mandatario constitucional, no un emperador ni un pequeño dictador”, durante una conferencia de prensa realizada junto a los ministros Pablo López (Economía), Nicolás Kreplak (Salud) y el director ejecutivo del Consejo Universitario Provincial, Alejandro Villar.

Los funcionarios abordaron el impacto de los vetos presidenciales que anularon tres leyes clave: la de Emergencia en Pediatría, la de Financiamiento Universitario y la de reparto automático de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN). Según Bianco, el encuentro resultó “muy oportuno” porque el Congreso, como representación de la voluntad popular, ya había respaldado esas iniciativas.

Además, el funcionario destacó que “el Presidente debe respetar lo que decide la mayoría de los diputados y senadores y escuchar lo que expresó el pueblo bonaerense el domingo pasado”. Por lo tanto, subrayó que la ciudadanía rechaza “las políticas de ajuste, de motosierra y las formas de agresión a los sectores más vulnerables”.

Llamado a movilizarse y respaldo a legisladores

Bajo ese marco, Bianco anunció que la administración de Axel Kicillof brindará un apoyo explícito a los legisladores nacionales, con el objetivo de que este miércoles, en el Congreso, se logre revalidar la vigencia de las leyes vetadas por Milei. Asimismo, convocó a la ciudadanía a movilizarse hacia la Plaza de los Dos Congresos en la denominada Tercera Marcha Federal Universitaria.

De esa manera, el ministro sostuvo que “es el pueblo el que debe ejercer presión para defender sus condiciones materiales de vida”. Sin embargo, advirtió que la Casa Rosada muestra un “desconocimiento” hacia la decisión del Congreso y la voluntad de la sociedad.

Por su parte, el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, detalló el trasfondo de la norma vinculada a los Aportes del Tesoro Nacional. En ese sentido, recordó que esos recursos deben distribuirse entre las provincias para afrontar emergencias y desequilibrios financieros. “La Nación tiene acumulados 1.3 billones de pesos que son de las provincias y que no distribuyó. ¿Por qué no lo hizo? Hay que preguntárselo al Gobierno nacional”, cuestionó.

Salud y educación en el centro de la discusión

Mientras tanto, el titular de la cartera sanitaria, Nicolás Kreplak, puso el foco en la situación del Hospital Garrahan. Explicó que el desfinanciamiento amenaza con desarmar equipos de alta especialización que tardaron años en conformarse. “La destrucción que está sufriendo el Garrahan no es solo un problema económico, es algo que va a costar muchísimo rearmar”, alertó.

En paralelo, el director ejecutivo del Consejo Universitario Provincial, Alejandro Villar, denunció que el veto a la ley de financiamiento pone en jaque el funcionamiento de las universidades. “Sin actualización de becas, salarios y servicios, las universidades entran en un deterioro permanente. Esto afecta no solo la actividad académica y científica, sino también a la vida económica de las comunidades”, explicó.

Por lo tanto, Villar sostuvo que la sesión del miércoles en el Congreso será clave para garantizar la continuidad del sistema universitario.

Un frente político en expansión

Finalmente, los ministros coincidieron en que la sociedad argentina “seguirá defendiendo la salud y la educación públicas” y que el miércoles se lo harán saber a los legisladores nacionales con una presencia masiva en las calles. De este modo, la Provincia de Buenos Aires se coloca a la vanguardia de la resistencia contra las políticas del Gobierno nacional y busca marcar la agenda en un momento de alta conflictividad política.