El sindicato La Fraternidad, encabezado por Omar Maturano, lanzó un fuerte comunicado contra el Gobierno de Javier Milei. Acusó al Ejecutivo de impulsar un plan para “suprimir los ramales ferroviarios” por exigencia del FMI. Según el gremio, la medida amenaza servicios estratégicos como Retiro-Tucumán y Neuquén-Cipolletti. El conflicto, que ya afecta al transporte, mantiene un escenario de tensión.
Protesta en marcha y advertencias por cierres
La Fraternidad ratificó sus medidas de fuerza a pesar de la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo. Durante tres días consecutivos, los trenes circularon a 30 km/h, lo que generó demoras de hasta 40 minutos, cancelaciones de servicios y largas filas en colectivos.
En su comunicado, el sindicato recordó la frase de los años 90: “Ramal que para, ramal que cierra”. Y añadió: “Hoy no es el déficit ni los paros la excusa, es la billetera del FMI que pretende suprimir los ferrocarriles para imponer sus negocios”.
El gremio alertó sobre un cierre progresivo de servicios que ya afectaría recorridos como Buenos Aires-Rosario, Buenos Aires-Pehuajó, Pinamar, Bahía Blanca y el tren turístico Mercedes-Tomás Jofré. También mencionó La Banda-Fernández y Rosario-Cañada de Gómez.

Críticas a la falta de inversión
Para los maquinistas, la crisis del sector se profundiza con la falta de inversión estatal, la escasez de repuestos y el deterioro de material rodante. Señalan que la seguridad de pasajeros y trabajadores está en riesgo por el deficiente mantenimiento de vías y formaciones.
El gremio también cuestiona los ingresos que reciben algunas líneas, a los que califican como insuficientes. Además, critican los esquemas de diagramación e itinerarios, que consideran ineficientes y poco claros.
Un mensaje de resistencia
En un tono desafiante, el comunicado advierte: “La tercera es la vencida y, con los ferroviarios y el pueblo movilizado, vamos a detener la salvaje entrega de la Patria”.
El conflicto abre un nuevo frente de tensión entre el Gobierno de Javier Milei y los gremios del transporte. La Fraternidad asegura que no dará marcha atrás mientras continúe la amenaza de cierres. Con los usuarios afectados y un sistema ferroviario en crisis, la disputa promete escalar en los próximos días.