El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, rompió el silencio tras la difusión de los audios de la secretaria de la Presidencia, Karina Milei. Al respecto, reveló que la hermana del presidente habría sido grabada en la Cámara de Diputados, aunque no se atrevió a confirmar que se trate de material verosímil.
Esta mañana, el canal de streaming Dopamina dio a conocer otro audio en donde Karina Milei menciona al funcionario. El periodista Marcos Casas aprovechó la ocasión para decir lo siguiente: “Desde este medio pequeño y humilde, localizado en la República Oriental del Uruguay, vamos a pasar audios que nos llegan de la vecina orilla con la voz de Karina Milei, continuación de los que iba a emitir Jorge Rial en su canal Carnaval e involucran a nuevas personas”.
El audio en cuestión dice: “Hay que estar abajo de Martín. Hay que, porque yo digo, Martín es el que tiene la información de qué hay que hacer. Desde mi punto que me toca a mío, respeto a Martín como cabeza», dice la grabación ligada a la titular de la Secretaría de la Presidencia, que se tuvo que emitir en el país vecino debido al «bozal» legal que frenó la circulación de audios en Argentina.
¿Qué dijo Martín Menem?
Al mediodía, Martín Menem decidió hablar a través de sus redes sociales. «En primer lugar, quiero aclarar que ese audio, en el hipotético caso de que fuera real, pareciera haber sido grabado de manera ilegal en la Presidencia de la Cámara de Diputados», introdujo.
«Estos encuentros se realizan periódicamente para coordinar la labor parlamentaria y consolidar el trabajo legislativo de La Libertad Avanza. La línea y las instrucciones dentro del Congreso se definen en este ámbito, y la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, participa para aportar conducción política y asegurar que la labor legislativa esté en plena sintonía con el rumbo que impulsa el presidente Javier Milei junto con todo el Poder Ejecutivo», continuó el titular de la Cámara baja.
En los párrafos consecuentes, Menem ratifica que estas grabaciones formarían parte de una operación ilegal de inteligencia. «La presunta grabación ilegal y difusión de conversaciones privadas en el ejercicio de nuestra función pública es evidentemente un intento deliberado de desestabilización en el marco del proceso electoral», expuso.
Finalmente, remató: «El tren fantasma no soporta que un gobierno elegido por mandato popular avance contra sus privilegios, y por eso recurre a operaciones de inteligencia ilegal y campañas de difamación».
