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ESPECTÁCULO

«Me lo diagnosticaron»: Alberto Cormillot decidió hablar de la enfermedad que enfrenta

 

Se sinceró como nunca antes.

 
Alberto Cormillot

Un verdadero susto fue el que se desató en el mundo del espectáculo y en todo Canal Trece en los últimos días, cuando se conoció la noticia de la internación de Alberto Cormillot, uno de los médicos más reconocidos de nuestro país. Finalmente, y después de un procedimiento al que tuvo que someterse, intentó llevar tranquilidad.

Sucede que el marido de Estefanía Pasquini habló en Cuestión de Peso (CDP) y contó qué fue lo que realmente le sucedió. Se trató de una molestia en el medio del pecho que se iba hacia la mandíbula y hacia los oídos. “Era una molestia rara”, expuso el médico.

Además, reveló que le hicieron una angioplastía. Esto se determinó luego de que le hicieran un estudio para determinar el estado de sus arterias. «Estaban todas muy bien, salvo una. Y que era la que, si yo no iba en ese momento, se hubiera tapado», comenzó señalando Alberto Cormillot.

«Si no hubiese ido en ese momento, quizás me hubiera agarrado un infarto», manifestó. Fue allí cuando decidió contar cuál es la enfermedad que enfrenta desde hace ya mucho tiempo. “Yo tengo colesterol hereditario, me lo diagnosticaron cuando tenía 20 años», señaló.

«Y lo vengo controlando desde aquella época. Pero bueno, tengo también muchos kilómetros de rodaje, y entonces se van acumulando placas en las arterias. Esas placas, si uno hace todo bien, se estabilizan, eso quiere decir que se meten adentro de la pared y no joroban más”, afirmó.

Fue allí cuando su hijo, Adrián Cormillot, tomó la palabra. “Son placas de ateroma. Uno a lo largo de la vida va acumulando pequeñas cantidades de grasa en la pared, que van produciendo como una especie de verruguita y a veces puede tener un accidente, es decir, un pedacito de esa verruguita se suelta y va a lo último de la circulación», dijo. «Me pusieron un stent en la arteria, que es como un tubito, como si estuvieran canalizando por adentro”, aclaró Alberto. «Es increíble que el resto del corazón de mi padre parecía de un pibe de 20 años”, sentenció su hijo.