En apenas unos días al frente del Benfica, José Mourinho dejó declaraciones que generaron repercusión en Portugal y en el mundo. El técnico luso elogió sin reservas a Nicolás Otamendi, a quien calificó como un líder real dentro y fuera del campo. “El brazalete está en el brazo de alguien que es realmente el capitán”, aseguró el entrenador de 62 años.
Mourinho, que asumió el 18 de septiembre, destacó la influencia del argentino sobre un plantel lleno de jóvenes. Para el portugués, Otamendi no solo representa a su equipo en la cancha, sino que también transmite valores y responsabilidad en el vestuario, consolidándose como ejemplo para los canteranos.
El rol de los juveniles y la conexión con el capitán
El ex DT del Real Madrid se mostró sorprendido por la madurez de los futbolistas surgidos en la cantera del Benfica. “Lo que me sorprendió enormemente es que quienes vienen de la cantera llegan con un vocabulario coherente, con motivación y responsabilidad”, señaló. Y subrayó que esa actitud tiene mucho que ver con el liderazgo del defensor argentino.
Mourinho dejó claro que contar con jóvenes preparados es un beneficio para cualquier entrenador, pero resaltó que la presencia de un referente como Otamendi potencia la cohesión del grupo: “Un entrenador del primer equipo, con chicos así, tiene que agradecerles, porque es de donde vienen”, apuntó.
Adaptación y compromiso en el nuevo ciclo
El técnico reconoció que todavía está en una etapa de adaptación con el plantel, aunque ya observa señales positivas: “Cada día siento que adoptan mi forma de trabajar, mi manera de liderar, mis conceptos”, expresó. Pese al corto tiempo —solo 4 o 5 días de convivencia—, consideró que el vínculo humano empieza a consolidarse, mientras que el trabajo táctico irá progresando poco a poco.
El último triunfo 3-0 frente al AVS reforzó la confianza del entrenador, que valoró el compromiso de sus jugadores. “O ganas, o si no ganas, sales muerto. Muerto de cansancio, de intentarlo”, advirtió como consigna de entrega absoluta, reforzando su respaldo al liderazgo del capitán argentino.
Mourinho y un desafío personal
El propio técnico sorprendió con una reflexión íntima sobre su elección de dirigir al Benfica: “Si me quedara en casa hasta el final de la temporada ganaría más que trabajando aquí… pero no es lo que quiero. Me gusta estar sujeto a ganar o perder, a ser muy bueno un día y terrible al siguiente; eso es lo que me impulsa”.
Con esas palabras, Mourinho dejó en claro que su llegada al Benfica no es por comodidad, sino por el desafío de competir por títulos. En ese proyecto, la figura de Nicolás Otamendi aparece como un pilar fundamental para construir un equipo con identidad y ambición.