Después de más de dos años alejado de las canchas, Alejandro “Papu” Gómez dio la noticia que muchos esperaban. El mediocampista campeón en Qatar 2022 jugará en el Padova Calcio, equipo recientemente ascendido a la Serie B de Italia, donde intentará recuperar ritmo competitivo y cerrar su carrera en el alto nivel.
El anuncio llegó a través de la cuenta oficial de Instagram del jugador, justo en la previa del partido de la Selección Argentina contra Venezuela por las Eliminatorias. “Primer paso dado… No veía la hora de estar con mis compañeros y poder entrenarme con el Padova Calcio. Estoy muy feliz. Se vienen cosas buenas”, escribió el Papu junto a una foto en pleno entrenamiento.
El calendario de su esperado regreso
Aunque ya se entrena con sus nuevos compañeros, la sanción que pesa sobre el argentino tiene vigencia hasta el 20 de octubre de 2025, por lo que aún no puede competir. De cumplirse los plazos, su debut oficial podría darse el 25 de octubre, cuando el Padova reciba a la Juve Stabia por la fecha 9 de la Serie B.
El jugador de 36 años mantiene la ilusión intacta de volver a competir. Para él, este paso representa mucho más que un regreso: es la oportunidad de demostrar que todavía tiene fútbol para dar tras la dura suspensión.
“Tenía varias ofertas, pero elegí Padova”
En una entrevista con La Gazzetta dello Sport, Papu confesó que opciones no le faltaron para retomar su carrera. “Algunos clubes han llamado a mi agente para saber cómo estoy, cuándo termina la suspensión y cuáles son mis intenciones. Quiero esperar hasta el final de la temporada para saber en qué equipo podría encajar y luego hacer la pretemporada y trabajar para estar en la cima en octubre”, aseguró antes de tomar la decisión. Finalmente, fue el Padova el que logró convencerlo y quedarse con su fichaje.
El proyecto deportivo y la chance de sumar minutos rápidamente fueron factores clave para que el argentino se incline por este destino en la segunda división italiana.
El recuerdo de la sanción por doping
El regreso del Papu no puede entenderse sin repasar lo ocurrido en 2022. La Agencia Mundial Antidopaje (AMA) lo sancionó tras detectar en su organismo terbutalina, una sustancia prohibida. El propio jugador explicó que la ingirió a través de un jarabe de su hijo, pero el Comité Antidopaje de España consideró que se trató de un caso de “negligencia grave” y lo castigó con la suspensión que lo mantuvo fuera del fútbol.
Pese al duro golpe, Gómez nunca bajó los brazos. Hoy, con contrato en Italia y el respaldo de su nueva institución, comienza una nueva etapa que lo tendrá bajo la mirada de los hinchas argentinos, que lo recuerdan como parte del grupo que levantó la tercera estrella mundialista en Qatar.
Con un regreso que mezcla expectativa, revancha y emoción, el Papu se prepara para volver a pisar una cancha después de más de dos años de espera.