El Gordo de Navidad, sin espacio a dudas, es sinónimo de expectativa. Se trata de uno de los sorteos más icónicos y esperados todos los años. Además, es un juego que está presente en muchos países del mundo. Sus orígenes, con una fuerte carga de tradición y significado, data desde las primeras décadas del siglo XIX.

En aquel entonces, los juegos de azar empezaron a instituirse en tanto que forma de entretenimiento popular. Asimismo, comenzaron a consolidarse como una muy efectiva herramienta, cuya finalidad es la de recaudar fondos para distintas beneficencias sociales.
Los orígenes del sorteo
La historia dice que el primer Gordo de Navidad se ofició a finales del año 1812. Puntualmente, el 18 de diciembre. Fue en la ciudad de Cádiz, España, en la plenitud de la Guerra de la Independencia. Gestionado por el gobierno de ese país, su objetivo primigenio fue el de recaudar fondos para aliviar las arcas públicas evitando implementar nuevos impuestos. Por su parte, se ofrecía al público una ocasión para poder hacerse con premios significativos. Desde luego, aquel sorteo resultó ser un éxito más rápido de lo previsto. Paulatinamente, llegó a conformarse como una práctica anual que, además, señalaba el comienzo de la temporada navideña.
Durante sus primeras ediciones, los billetes del Gordo de Navidad se diseñaban y dibujaban a mano, con un patrón sencillo y austero que contrasta fuertemente con las versiones contemporáneas, tanto impresas como electrónicas. En aquel primer sorteo de 1812, el número beneficiado resultó ser el 03604. Como es de esperarse, los premios resultan modestos si se los compara con los de estos años. No obstante, el entusiasmo del público fue de tal magnitud que terminó sentando las bases para prolongación en el tiempo.
Consolidación y difusión
Con el paso del tiempo, el Gordo de Navidad fue ganando popularidad y adeptos por fuera de las fronteras españolas. En efecto, en otros países de habla hispana, se instauraron versiones locales y el sorteo se adaptó como una tradición local más.
En lo que respecta al aspecto técnico, el sorteo evolucionó de modo considerable. Como mencionamos, en sus inicios, los billetes se elaboraban de manera totalmente artesanal. Hoy en día, son impresos mediante tecnología avanzada con la finalidad que la seguridad y legitimidad de cada número sean una garantía. Asimismo, las transmisiones en directo del sorteo, sobre todo en España, han devenido en un evento cultural, con la emblemática escena de los niños de San Ildefonso cantando los números premiados. Esta práctica, ya toda una insignia, se mantiene vigente desde 1871.

En Argentina, la Lotería anunció que ya están a la venta los billetes para el sorteo de este año en curso. Por supuesto, los premios son más que ostentosos. Este año, el Gordo de Navidad asignará un total de $1.755.750.000 en premios. El primer premio será de más de $800 millones. Por su parte, el segundo entregará $250 millones, el tercero $65 millones, el cuarto $25 millones, y habrá $12 millones destinados al quinto premio, por billete entero.
