En plena crisis por la renuncia de José Luis Espert, Javier Milei presentó su libro La Construcción del Milagro y realizó un show en el Movistar Arena. El presidente criticó a los “kukas”, se enfrentó simbólicamente a Cristina Kirchner y Axel Kicillof, y buscó motivar a sus seguidores con cánticos y referencias musicales.
Milei y la crítica a los “kukas”
El presidente Javier Milei y su hermana Karina, secretaria general de la Presidencia, encabezaron el acto en el Movistar Arena, el miroestadio ubicado en el barrio porteño de Villa Crespo. Milei ingresó minutos antes de las 21. Aunque en el escenario lo esperaba una banda, los organizadores emitieron por altoparlantes la versión original de “Panic Show” de La Renga, tema que adoptó como leitmotiv desde 2023.
Durante el evento, Milei acusó a los “kukas” de “tirapiedras” al incluirlos en una versión punk de “Dame Fuego”, de Sandro. También emitió un corto estilo Star Wars donde se lo ve en confrontación con medios de comunicación, Cristina Kirchner y Kicillof.
“Si no, no harían tantas operaciones; el que sabe que va a ganar no hace trampa”, afirmó Milei ante el público, resaltando su confianza en la victoria electoral.
Cánticos y mensajes políticos
El presidente alentó a los asistentes a entonar el cántico “Cristina tobillera”, en referencia a la prisión domiciliaria de la ex presidenta por la causa Vialidad. Esto ocurrió tras un canto de los seguidores: “El que no salta es kuka”.
Además, Milei advirtió: “Pudiste ganar un round pero todavía no ganaste la batalla, y mucho menos la guerra”, en referencia a la victoria del peronismo en las elecciones bonaerenses del 7 de septiembre.
Banda de acompañamiento y referencias culturales
La banda que acompañó al presidente incluyó a los diputados Lilia Lemoine y Alberto ‘Bertie’ Benegas Lynch. Abrieron con una versión de “Demoliendo Hoteles” de Charly García. Javier Milei presentó a Lemoine como “la destructora de las operetas kukas” y ponderó a Juan Pablo Benegas Lynch en guitarra rítmica.
El show combinó música, política y mensajes directos al público, en un intento de reforzar la imagen de Milei frente a la crisis interna tras la salida de Espert.