En un encuentro con más de 500 dirigentas sindicales de todo el país, la Mesa de Mujeres de la CGT exigió la incorporación de una mujer al Triunvirato de conducción. “No es una concesión ni un símbolo vacío”, afirmaron. Con la presencia de Héctor Daer y Andrés Rodríguez, el debate marcó un paso clave hacia la igualdad sindical.
Una demanda con historia en la CGT
El Encuentro de Mujeres de la CGT reunió a representantes de más de 34 gremios en una jornada que reflejó el crecimiento del espacio femenino dentro de la Confederación. Durante el evento, se presentó la “Declaración de las Mujeres Trabajadoras de la CGT”, un documento que reafirma el compromiso con la unidad del movimiento obrero y con la ampliación de la representación femenina en todos los niveles de la organización.
“Una mujer en el Triunvirato no es una concesión ni un símbolo vacío, sino el reconocimiento político de una realidad que se organiza día a día”, destacaron las participantes. El reclamo busca consolidar una presencia sostenida y activa de las trabajadoras en los espacios de decisión, en línea con el proceso de renovación interna que atraviesa la central obrera.
Presencia y liderazgo femenino
Entre las dirigentes presentes estuvieron Héctor Daer, Andrés Rodríguez, José Luis Lingeri, Jorge Sola, Cristian Jerónimo y Julio Piumato, quienes acompañaron la exposición del documento. Maia Volcovinsky, co-secretaria de Derechos Humanos de la CGT, subrayó: “Gracias a que muchas mujeres construyeron representación en sus gremios, hoy consolidamos una presencia fuerte en la calle. Si pedimos estar en los máximos niveles de decisión es porque lo practicamos hacia adentro, y eso nos da legitimidad”.
Volcovinsky remarcó que las trabajadoras son “quienes más sufren las consecuencias de los modelos neoliberales, pero también quienes más trabajan para transformarlos”. Su mensaje fue celebrado con aplausos por las participantes, que coincidieron en la necesidad de sostener la organización como herramienta de cambio.
De la paridad a la acción colectiva
El proceso que llevó a este reclamo comenzó en 2021, cuando se incorporó la paridad de género en el Consejo Directivo de la CGT. Desde entonces, las mujeres organizaron espacios permanentes de trabajo y realizaron movilizaciones que fortalecieron su estructura interna.
Durante 2024, más de mil dirigentas participaron del Encuentro Nacional en Buenos Aires, y en 2025 se desarrollaron encuentros regionales en Chubut, Neuquén, Mendoza y La Plata. Antes de fin de año, se prevén nuevas reuniones en otras provincias para seguir impulsando la participación femenina.
“Hoy es un día histórico”
Marina Jaureguiberry, secretaria general de SADOP y miembro del Consejo Directivo de la CGT, sostuvo: “Hoy es un día histórico. Nos toca construir las voces en todos los lugares y fortalecer la presencia de las mujeres en la CGT y en la calle. Cuando se cuente esta historia, podremos decirles a nuestras hijas y nietas que fuimos protagonistas”.
En la misma línea, Vanesa Núñez, secretaria administrativa de UTEDYC, destacó: “El poder que construimos no es patriarcal ni individual, es un poder de red. Eva Perón es nuestro faro político: nos enseñó a organizarnos y ejercer el poder mirando la realidad. Cuando llegue una, vamos a llegar todas”.
Una CGT más plural y representativa
El documento presentado recupera la historia de militancia sindical de las trabajadoras y llama a fortalecer la unidad del movimiento obrero. En un contexto económico complejo, las mujeres reafirmaron que la CGT debe sostener estructuras vivas, plurales y representativas.
“El encuentro cerró con una convicción compartida: seguir ampliando la participación de las mujeres en la vida sindical y hacer de la CGT una herramienta cada vez más representativa de quienes sostienen el trabajo en todo el país”, concluyeron.
