El panorama en River es cada vez más tenso. La eliminación de la Copa Argentina y la incertidumbre por la clasificación a la Libertadores 2026 encendieron las alarmas en Núñez. Mientras el equipo atraviesa un momento de inestabilidad futbolística, Marcelo Gallardo y la dirigencia ya comenzaron a delinear el próximo mercado de pases, que podría marcar el rumbo del nuevo ciclo.
En el club entienden que el cierre del año será clave para tomar decisiones. El cuerpo técnico y la secretaría deportiva trabajan en silencio, pero con objetivos concretos: rearmar el plantel y recuperar la identidad competitiva que caracterizó a River en la última década. Gallardo, mientras tanto, atraviesa un proceso de evaluación interna que definirá si continúa o no al frente del equipo.
Dos puestos prioritarios para 2026
Según adelantó el periodista Juan Cortese (TyC Sports), el entrenador ya comunicó cuáles son las zonas que considera más urgentes de reforzar: el mediocampo y el lateral izquierdo. En la mitad de la cancha, la salida de Enzo Pérez y el bajo rendimiento de algunos jugadores dejaron al equipo sin equilibrio, una de las grandes preocupaciones del DT.
En defensa, la situación de Milton Casco, cuyo contrato finaliza en diciembre, podría acelerar su retiro o una posible salida. Ante ese panorama, Gallardo pidió alternativas que aporten intensidad y proyección en los costados. La idea es sumar futbolistas con experiencia y buena condición física para revitalizar la estructura táctica del plantel.
Una reestructuración total en el horizonte
Mientras define refuerzos, la dirigencia también analiza la salida de algunos referentes. Nombres como Paulo Díaz y Fabricio Bustos aparecen en la lista de posibles transferencias, algo que abriría espacio para nuevos ingresos. La intención es renovar sin perder jerarquía, pero con un enfoque más competitivo y físico para la próxima temporada.
Gallardo, por su parte, mantiene la cautela sobre su futuro. Tras la derrota en Córdoba, fue directo: “Analizaremos al final de la temporada y tomaremos la decisión que haya que tomar”, declaró. Sus palabras reflejan un momento de replanteo personal y profesional, mientras los hinchas se aferran a la esperanza de que siga liderando el proyecto.
En las próximas semanas, River enfrentará un escenario decisivo: la posible continuidad del Muñeco y el rediseño de un plantel que necesita cambios urgentes. El próximo mercado de pases no será uno más, sino una bisagra que puede marcar el comienzo de una nueva etapa o el cierre definitivo de una era dorada.
