En un alto en las grabaciones de sus programas, la mesa de La Noche de Mirtha y Almorzando con Juana se convirtió en escenario de un momento tan espontáneo como entrañable. Mirtha Legrand y Juana Viale compartieron un divertido challenge familiar que rápidamente se volvió viral en redes sociales. El juego dejó al descubierto la complicidad entre las tres generaciones de mujeres más famosas de la televisión argentina.
El juego que hizo reir a Mirtha Legrand
Con carteles en mano y la guía de una locutora fuera de cámara, abuela y nieta respondieron a una serie de preguntas sobre los roles familiares. Las respuestas, lejos de ser coincidentes, generaron risas, miradas cómplices y hasta pequeños “reclamos” amorosos que reflejaron la autenticidad del vínculo.
El juego comenzó con una pregunta directa: “¿Cuál de las tres madres es la más protectora de la familia?”. Sin dudarlo, Mirtha se eligió a sí misma, mientras que Juana levantó el cartel con la cara de su mamá, Marcela Tinayre. La tendencia se repitió cuando se consultó quién saca más fotos familiares o hace los mejores regalos. Mirtha se adjudicó ambas, pero su nieta volvió a optar por Marcela. Cuando llegó la pregunta sobre cocina, coincidieron en que Marcela es la mejor cocinera del grupo.
Uno de los momentos más comentados fue cuando se consultó quién manda más mensajes al grupo de WhatsApp familiar. “Mirtha, todo el tiempo”, dijo Juana provocando carcajadas en el set .
Al finalizar el juego, Mirtha aprovechó para enviar un mensaje a todas las madres: “Que disfruten de la vida, que es maravilloso”, dijo con emoción. A sus 98 años, la conductora continúa sorprendiendo con su vitalidad. En los últimos días relató una de sus maratónicas jornadas: una tarde en el Teatro Colón disfrutando de Marianela Núñez y una noche en el Gran Rex viendo a Soledad Pastorutti. “Salí de mi casa a las cuatro de la tarde y volví a las once, fresca como una lechuga”, bromeó.
Entre humor, ternura y anécdotas, el desafío familiar dejó una certeza: Mirtha sigue siendo la reina absoluta de la televisión y del corazón de los argentinos, combinando elegancia, humor y una energía que parece no tener fin.