El Real Madrid volvió a acaparar las miradas dentro y fuera de la cancha. En el marco de su acuerdo con BMW, el club español entregó un vehículo de lujo a cada uno de sus futbolistas, y la elección de uno de los más jóvenes del plantel, el argentino Franco Mastantuono, llamó poderosamente la atención.
El volante de 18 años, surgido en River, vive su primera temporada en el conjunto blanco y empieza a adaptarse al ritmo de uno de los clubes más exigentes del mundo. Pero su reciente elección fuera del campo generó comentarios en toda Europa.
El particular gusto de Mastantuono en el Real Madrid
En el evento organizado por BMW España, los 25 jugadores del plantel profesional y el entrenador Xabi Alonso recibieron un vehículo eléctrico de la marca alemana. La mayoría optó por los modelos más caros de la flota, como el BMW i7 o el BMW XM, valuados en más de 200 mil euros.
Sin embargo, Mastantuono sorprendió a todos al elegir el BMW i4 M60, un modelo más modesto dentro de la gama, pero igualmente sofisticado. El valor de su auto ronda los 80 mil euros, muy por debajo de las cifras elegidas por sus compañeros.
Un gesto que refleja su perfil bajo
La decisión del joven mediocampista fue interpretada por muchos como una muestra de humildad y sencillez. En contraste con los lujos habituales del Real Madrid, Mastantuono eligió un vehículo más práctico, destacando su perfil tranquilo y reservado.
Aun así, el BMW i4 M60 no deja de ser una joya tecnológica: combina velocidad, diseño deportivo y eficiencia eléctrica, características que encajan con el estilo de vida moderno que la marca busca promover entre los jugadores.
Los números de Mastantuono en su primera temporada
Desde su llegada a Madrid, el argentino ya disputó nueve partidos oficiales entre LaLiga y la Champions League, acumulando más de 500 minutos, un gol y una asistencia. Su progreso constante y su buena adaptación al plantel lo convirtieron en una de las promesas más seguidas del fútbol europeo.
Mientras sigue ganándose un lugar en el equipo, Mastantuono continúa demostrando que su crecimiento no solo se mide dentro del campo, sino también en la madurez de sus decisiones fuera de él.
