Tini Stoessel y Rodrigo de Paul sorprendieron al decidir suspender el casamiento que estaba previsto para fin de año. La pareja, que venía trabajando en los preparativos desde hace meses, optó por frenar todo y replantear la fecha. La noticia generó revuelo entre sus seguidores y abrió la puerta a miles especulaciones. Aun así, desde su entorno aseguran que no hay crisis de pareja pero se habla mucho del tema.
Todo empezó cuando, Laura Ubfal contó que la decisión se habría tomado por cuestiones de organización y tiempos personales. Ambos están atravesando agendas exigentes que dificultan coordinar un evento de la magnitud que imaginaban. En lugar de avanzar a contrarreloj, prefirieron esperar el momento adecuado. “Ellos tienen que ir a vivir a Miami. Ella tiene visa de trabajo, pero lo que les conviene es casarse en Estados Unidos, porque él está contratado por el Inter de Miami y así ella puede tramitar la residencia”, dijo la periodista.
Otro punto clave es que la pareja estaría evaluando cambiar el formato de la celebración. Más que un casamiento tradicional, analizan la posibilidad de realizar una ceremonia íntima, alejada de los conflictos mediáticos. Y es que quieren que el evento refleje su identidad y no una obligación social. Sin embargo, Karina Iavícoli encendió las alarmas al hablar de si Camila Homs y Rodrigo de Paul ya estaban divorciados, generando la incógnita de si esto pudo ser la causa de la suspención de la boda entre la cantante y el jugador.
A lo que Iavícoli expresó en el programa Infama: “A mí me dijeron que va a ser una fiesta, no un casamiento. Que no se van a casar. O sea, sería sin papeles, como una gran celebración. Y si ya se divorció de Camila Homs, ¡que se casen!” Pero, a la par de esta declaración, soltó otra noticia. “Cuando trascendió que se iba a casar el 20 de diciembre, empezaron a llamar, porque es la fecha de vacaciones de los futbolistas”.
Los vaivenes de Tini Stoessel y Rodrigo de Paul
Además, Tini Stoessel y Rodrigo de Paul están atravesando cambios personales importantes. Se habla de un posible traslado al exterior, específicamente a Estados Unidos, lo que implica trámites y decisiones que necesitan prioridad. En medio de ese proceso, avanzar con una boda formal resultaba demasiado complejo. Por eso prefirieron postergar antes que improvisar. De hecho, se conoció hace poco que están construyendo sus casas en Miami y en Buenos Aires.
Por ahora, la pareja no fijó una nueva fecha ni dieron detalles sobre cómo será la flamante versión del evento. Lo único claro es que el casamiento no será este año y que todo se reordenará con más calma. El tiempo dirá si la pareja elige un festejo grande, uno simbólico o un formato completamente distinto.
