Un 29 de noviembre de 2024, sin anuncios y lejos del ruido, la China Suárez y Mauro Icardi daban inicio a una relación que recién confirmarían en redes el 9 de enero de 2025. Desde entonces, su historia se transformó en uno de los temas más comentados del espectáculo argentino: un año entero de posteos románticos, viajes, convivencia en Turquía junto a los hijos de la actriz y un torbellino mediático que no afloja.
Antes del primer posteo oficial, los movimientos en redes de ambos ya despertaban sospechas. Cada foto, cada presencia compartida y cada “coincidencia” era analizada por fans y curiosos. En plena ola de rumores con el delantero del Galatasaray, Eugenia viajó a Madrid, donde fue vista con el piloto Franco Colapinto. El affaire duró apenas una salida, aunque ella decidió sellar ese breve capítulo con un tatuaje del número 43, el dorsal del piloto.
La confirmación del amor de la China Suárez y Mauro Icardi
Un mes después, llegó la foto que todos estaban esperando: Mauro subió un carrete con imágenes abrazado a Eugenia, con un texto romántico que hablaba del destino y de encuentros “escritos en las estrellas”. Ella reposteó: “Voy a morir de amor”. El detalle que no pasó desapercibido fue la elección musical: “París”, de Ingratax, ciudad clave en el origen del Wandagate en 2021.
El primer viaje fue corto pero simbólico: un avión privado rumbo a Mar del Plata, donde Eugenia tenía un compromiso con una marca. Aparecieron imágenes de la actriz en modo cowgirl y de los dos bailando en la Bresh, felices y sin esconderse. El 26 de enero, Mauro la llevó al Monumento a la Bandera, un paseíto sentimental por la ciudad donde creció. La foto, subida por Icardi, fue un gesto fuerte: presentar a su nueva pareja en su lugar más significativo.
El segundo viaje tuvo destino europeo, con una parada clave en Milán para avanzar con temas del divorcio del futbolista. Aunque Icardi tiene propiedades allí, la pareja se hospedó en un hotel cinco estrellas. Una cuenta de chismes filtró la primera imagen en tierras italianas, donde visitaron tiendas exclusivas y recorrieron la ciudad.
En febrero viajaron a Estambul, donde se instalaron en la mansión de Icardi. La China recorrió la ciudad, posó frente al Palacio Dolmabahçe y acompañó al futbolista al estadio del Galatasaray. “Estoy feliz de poder acompañarte”, escribió ella; él respondió con emojis y fotos del frío turco cubriendo su casa.
