El politólogo Andrés Malamud analizó la decisión del presidente Javier Milei de designar a Manuel Adorni como nuevo jefe de Gabinete y aseguró que el cambio refleja una virtud clave del oficialismo: su capacidad de aprendizaje. “El Gobierno tiene arrogancia en la victoria y humildad en la derrota. Y la humildad es mejor maestra”, señaló en diálogo con LN+, al evaluar el relanzamiento del equipo de ministros tras los comicios legislativos.
El analista planteó que el movimiento dentro del gabinete demuestra que “cuando el Gobierno necesita cambiar, cambia”, y destacó que esa flexibilidad política explica buena parte del éxito del oficialismo en su primer tramo de gestión. “Lo que vemos después de las elecciones es lo normal: organización en el partido del Presidente y fragmentación enfrente”, resumió.
La reorganización del poder político tras las elecciones
Malamud sostuvo que el escenario actual refleja una hegemonía libertaria consolidada frente a una oposición dispersa. “Hoy Milei no tiene a nadie por delante porque la mayoría de los gobernadores salieron derrotados. Y esa situación hace que el peronismo esté desorganizado, lo que al mismo tiempo le impide encontrar un candidato natural”, explicó.
Según el analista, “los partidos tradicionales ya no son confederaciones de provincias”, sino espacios desarticulados, incapaces de generar un liderazgo nacional. “Va a haber organización únicamente cuando haya un candidato que mueva el amperímetro. Mientras no lo haya, el partido presidencial es violeta”, sentenció, en referencia al color identitario de La Libertad Avanza.
Desde su perspectiva, la falta de figuras competitivas en el arco opositor contrasta con la centralidad que mantiene Milei, quien “sigue capitalizando el apoyo social a su programa de cambio”, incluso en medio de las tensiones políticas.
La economía como factor clave del ciclo político
En otro tramo del análisis, Malamud señaló que la economía será “el eje determinante del futuro político del Gobierno”. “Muchos presidentes caen por la economía, pero políticamente Milei tiene el camino abierto”, sostuvo.
El analista extendió su reflexión al plano regional: “Hasta 2015 en América Latina la reelección era la norma; luego, la excepción. Todo depende de la economía y de la suerte que tenga un presidente. Es lo que le pasó a Macri, a Trump y a Alberto Fernández”.
Para Malamud, la gestión económica de Milei definirá no solo su gobernabilidad sino también su proyección futura. “En la Argentina, cuando la economía se cae, parece que todo se cae con ella”, afirmó, aunque aclaró que el oficialismo “ha demostrado capacidad para aprender de los errores y adaptarse al contexto”.
El peso del clima mediático y la lectura del poder
El especialista también analizó el papel del sistema mediático en la construcción de percepciones políticas. “El clima mediático muchas veces altera las percepciones. Un ejemplo claro fue el narcoescándalo de Espert, que terminó siendo una bendición para el Gobierno, porque la gente los apoyó masivamente cuando lo desplazaron”, argumentó.
Finalmente, Malamud señaló que el triunfo del oficialismo en la Ciudad de Buenos Aires representó “una lección interna para el propio Gobierno”. “Puertas adentro, aceptaron que ganar la Capital generó un problema. Desde la arrogancia inicial, leyeron mal la realidad. Pero se ve que aprendieron de esa derrota”, concluyó, en alusión al relanzamiento político encabezado por Adorni.
