La conductora Sabrina Rojas lanzó al aire en Pasó América una indirecta cargada de ironía hacia su exmarido Luciano Castro, luego de verlo acompañado por Griselda Siciliani en la Marcha por el Orgullo 2025. Durante su programa, al presentar la cobertura del evento, comentó que “sí, estuvo un montón de gente en la marcha… que estaría bueno que esté en otros lugares también”, frase que despertó asociaciones inmediatas con el actor.
Y es que el comentario surgió justo cuando circulaban imágenes de Luciano Castro en la manifestación, lo que le dio al comentario un doble sentido evidente. Mientras el conductor televisivo estaba presente en el acto social de apoyo a la diversidad, Sabrina Rojas aprovechó la ocasión para poner el foco en él, recordando viejas críticas sobre su rol como padre y su presencia.
La tensión no es solo por la exposición pública, sino por lo simbólico: la marcha, la compañía Griselda Siciliani con Luciano Castro y la frase de Sabrina Rojas confluyeron en un momento que trasciende lo anecdótico. En este sentido, Rojas cuestionó en otras ocasiones el vínculo personal y la implicancia que el padre de sus hijos tiene en ciertos ámbitos y esta ocasión sirvió para que lo evocara nuevamente sin mencionarlo directamente.
Por su parte, Luciano Castro continúa con su vida pública y participando de acciones sociales, y la aparición junto a Griselda Siciliani pareció encender esa chispa latente del conflicto mediático. Aunque no hubo un reclamo explícito en cámara, la indirecta de Sabrina fue suficiente para reactivar el debate sobre la relación entre ambos y la imagen pública de cada uno.
Con toda esta movida, el comentario de Sabrina Rojas volvió a poner en primer plano la dinámica entre dos figuras que compartieron parte de su historia y cómo hoy esa historia reaparece en clave de intuiciones y señales más que de declaraciones. El episodio reafirma que, incluso sin nombrar, los mensajes pueden tener repercusión cuando se dibujan en televisión y las redes sociales.
