La discusión sobre el monotributo volvió a instalarse en el centro del debate económico argentino. En una entrevista radial, Federico Sturzenegger lanzó definiciones de fuerte impacto sobre el futuro del régimen y la necesidad de ordenar la estructura tributaria, al tiempo que mencionó el rol del ministro Luis Caputo en estos cambios. Las declaraciones, realizadas en Radio Mitre, abrieron interrogantes sobre cómo evolucionará el esquema impositivo que afecta a millones de trabajadores y profesionales.
En ese sentido, Sturzenegger subrayó que la reforma proyectada por el Gobierno busca reducir la carga que pesa sobre el empleo formal y simplificar los tres regímenes actuales: cuarta categoría, autónomos y monotributo. Bajo ese marco, señaló que el objetivo no es eliminar el régimen simplificado, sino “ordenarlo” y equiparar alícuotas que hoy presentan diferencias notorias. De esa manera, el exfuncionario remarcó que será Caputo quien anuncie los detalles específicos.
Además, el economista repasó la situación histórica del monotributo y recordó que el Gobierno ya amplió sus topes en la Ley Bases original, permitiendo que muchos profesionales continúen dentro del esquema sin saltar abruptamente a un régimen más costoso. Según explicó, este fue un primer paso hacia la reorganización impositiva que la gestión pretende consolidar.
Un régimen en tensión: carga tributaria y empleo formal
Sturzenegger señaló que la Argentina arrastra un problema estructural: no crea empleo formal desde hace más de quince años. Bajo ese contexto, describió a la relación laboral como un espacio donde “todos caranchean”, en alusión a los múltiples costos que recaen sobre cada contrato de trabajo.
Según planteó, el Estado es el primer actor que presiona con impuestos elevados. Sin embargo, también mencionó a los sindicatos, la llamada industria del juicio y hasta ciertos aportes exigidos por el sector empresario. Todos estos “peajes”, sostuvo, terminan encareciendo la contratación y limitando la posibilidad de mejorar salarios reales.
En esa línea, insistió en que la reforma laboral debe ir acompañada de una reducción de la carga fiscal. Caputo, afirmó, ya manifestó su intención de avanzar en ese sentido y de unificar criterios dentro del sistema tributario.
Ordenar sin eliminar
Durante el reportaje, Sturzenegger fue explícito: “Una cosa es ordenar y otra es eliminar”. El monotributo, remarcó, continuará existiendo, pero deberá adaptarse a un esquema más coherente con el resto de los tributos sobre ingresos. La meta, afirmó, es que el régimen simplificado conviva con la cuarta categoría sin diferencias tan marcadas en materia de alícuotas.
Asimismo, destacó que la ampliación del tope del monotributo fue un alivio para numerosos profesionales que antes se veían forzados a dividir facturación o recurrir a estrategias informales para no quedar fuera del sistema.
