En un mercado de pases cada vez más complejo, River sigue con el ojo puesto en una operación de largo alcance. Aunque los focos suelen estar sobre lo inmediato del rendimiento del equipo de Marcelo Gallardo, la dirigencia trabaja en un plan más ambicioso: cerrar un acuerdo con São Paulo que implique tres movimientos simultáneos.
El plan original y sus protagonistas
La estrategia inicial, que comenzó a gestarse cuando Jorge Brito todavía era presidente, consistía en reforzar el mediocampo con Galoppo al tiempo que Tapia y Díaz salían rumbo a Brasil. Según el periodista Hernán Castillo, “River y São Paulo están en charlas permanentes por Giuliano Galoppo, Enzo Díaz y Gonzalo Tapia… la idea es que se den los tres pases cruzados”.
La operación es más que deportiva: refleja una visión estratégica donde River reorganiza su plantel mientras genera un flujo mutuo con el club brasileño.
¿Se derrumba el acuerdo?
Aún hay condiciones por cumplirse. En el caso de Galoppo, por ejemplo, existe una obligación de compra que sólo se activa si juega al menos 45 minutos en la mitad de los partidos oficiales del año. Si cae ese criterio, la transferencia podría quedar en suspenso.
Pese a los rumores de ese posible quiebre, la postura del Millonario se mantiene firme. Según fuentes informadas, la intención es no modificar el acuerdo y seguir adelante con las tres incorporaciones en simultáneo.
Lo que está en juego para River
Con resultados muy por debajo de las expectativas, el club entiende que no solo debe corregir en la cancha, sino también armar un plantel proyectado hacia el futuro. Este “triple acuerdo”, entonces, no solo llena huecos hoy, sino que también anticipa un nuevo ciclo para el club.
Si se concreta, será una de las operaciones más resonantes del mercado local, con impacto en lo deportivo y económico. Si no, marcará un traspié que podría tener efectos en la credibilidad de la dirigencia y en la paciencia del hincha.
