Connect with us

Hola, qué estás buscando?

POLÍTICA

Interna PRO-LLA: en el Gobierno le quitan relevancia a Mauricio Macri y piden «que se ubique»

 

Javier Milei atraviesa una nueva turbulencia política dentro de su sociedad con el PRO, luego de las críticas públicas de Mauricio Macri.

 
Javier Milei, Mauricio Macri
Javier Milei se reunirá mañana con Mauricio Macri en Olivos para recomponer la relación política y coordinar estrategias antes de los próximos comicios.

El presidente Javier Milei atraviesa una nueva turbulencia política dentro de su sociedad con el PRO, luego de las críticas públicas de Mauricio Macri por los recientes cambios en el Gabinete. En la Casa Rosada, sin embargo, aseguran que los cuestionamientos del expresidente “no preocupan” y marcan distancia de su figura en medio de la reconfiguración del poder libertario.

Macri no nos importa”, resumió un alto funcionario del Ejecutivo ante la agencia NA, en respuesta a la disconformidad del titular del PRO con la designación del exvocero Manuel Adorni como jefe de Gabinete. En el oficialismo consideran que el fundador del PRO “perdió influencia” y que su peso político “se desvanece” entre fugas internas y disputas con Patricia Bullrich, quien conserva una estructura propia dentro del partido.

Desde el entorno de Milei destacan que el expresidente “ya no tiene capacidad de conducción” y que “su figura genera más rechazo que apoyo”. “Tiene tres diputados y el 80% de imagen negativa. Que se ubique”, deslizó un colaborador cercano al jefe de Estado.

La relación entre ambos líderes se deterioró luego de la reunión en la Quinta de Olivos, donde Macri se enteró de los cambios en el Gabinete y manifestó su descontento por el desplazamiento de Guillermo Francos. Al día siguiente, publicó en su cuenta de X una propuesta alternativa: Horacio Marín, actual presidente de YPF, como reemplazo de Francos. “No estoy enojado, estoy decepcionado”, admitió el propio Macri en un foro empresario organizado por ABECEB.

Dentro del Gobierno interpretan la reacción como una muestra de “inestabilidad política” del exmandatario. “Un día te tira una bomba y al otro te elogia. Ahora estamos en la fase del bombazo”, ironizó un funcionario libertario. De hecho, apenas 24 horas después de criticar la designación de Adorni, Macri celebró la llegada de Diego Santilli al Ministerio del Interior, lo que fue leído como una contradicción.

Macri actuó en caliente. Fue un error proponer un reemplazo. Encima, pidió que Francos se quedara, pero ya tenía otro nombre. Todo muy desprolijo”, señaló una fuente oficial. Incluso, el propio Marín se comunicó con el Ejecutivo para aclarar que no había participado en esa postulación.

En el entorno del PRO reconocen que Macri insiste en colocar referentes propios en áreas estratégicas, aunque su margen de influencia se redujo tras la salida de Francos, el único interlocutor que le tendía puentes con la administración libertaria. Hoy, tanto Karina Milei como Santiago Caputo mantienen una relación distante y desconfiada con el exjefe de Estado, lo que complica cualquier intento de mediación.

Con el equilibrio interno del Gobierno en plena transformación, Milei apuesta a consolidar una estructura más autónoma, incluso si eso implica romper definitivamente con Macri. Por ahora, en el Ejecutivo aseguran que no habrá reuniones previstas ni gestos de acercamiento: la prioridad está puesta en la gestión y en el reordenamiento interno tras los cambios en el Gabinete.