El presidente Javier Milei ratificó en una entrevista con el Financial Times que su gobierno mantendrá la política de bandas cambiarias hasta las elecciones presidenciales de 2027, descartando la posibilidad de permitir la libre flotación del dólar. En diálogo con los periodistas Michael Stott y Ciara Nugent, el mandatario sostuvo que la estrategia monetaria actual es clave para «controlar la volatilidad crónica de la economía argentina» y aseguró que «tenemos un programa y lo vamos a mantener«, en alusión al esquema de estabilidad que sigue vigente tras la inyección de u$s 2.000 millones del Tesoro estadounidense y el triunfo legislativo de La Libertad Avanza.
«Milei sugirió que mantendría el peso dentro de bandas de fluctuación cada vez más amplias frente al dólar estadounidense al menos hasta las elecciones de finales de 2027», señala el artículo del medio británico, que describe la postura del presidente como un intento por consolidar la confianza internacional en la economía argentina. El jefe de Estado desestimó las críticas de economistas locales que advertían una sobrevaloración del peso: «¿Qué cree usted que vale más? ¿El criterio de un experto que ha tenido mucho éxito y cuenta con el respaldo del Tesoro estadounidense o el de un grupo de ineptos locales?», respondió, en referencia al secretario del Tesoro norteamericano Scott Bessent, quien recientemente había calificado a la moneda argentina como «infravalorada».
El mandatario explicó que las bandas de flotación «están diseñadas para ampliarse con el tiempo» y que «llegará el momento en que ya no serán relevantes», aunque insistió en que, por ahora, el esquema resulta necesario para estabilizar la economía y prevenir saltos bruscos en el tipo de cambio.
Respaldo financiero, crecimiento y más
Durante la entrevista, Javier Milei celebró el respaldo financiero de Washington, al que consideró una muestra concreta de una nueva etapa de cooperación hemisférica. Destacó que el swap y la compra de pesos por parte del Tesoro norteamericano fueron medidas decisivas para evitar una corrida cambiaria y sostuvo que esas acciones reflejan «una suerte de doctrina Monroe económica«, orientada a reafirmar la influencia de Estados Unidos en América Latina frente al avance de China. «Estados Unidos ha decidido ser el líder de la región, y eso es fabuloso», expresó el presidente, quien elogió la decisión de la Casa Blanca de priorizar el apoyo a gobiernos aliados.
En el plano doméstico, Milei aseguró que su programa económico comenzará a mostrar resultados concretos en 2026, año en el que prevé un crecimiento del PBI de entre 7% y 10% anual. Explicó que las reformas laboral y tributaria que su administración impulsa en el Congreso serán el motor de esa recuperación, especialmente a partir del recambio legislativo de diciembre, cuando La Libertad Avanza contará con mayor representación.
En cuanto a la coyuntura internacional, el presidente sostuvo que el mundo atraviesa una nueva etapa geopolítica marcada por «el fracaso de la ideología woke» y la consolidación de tres bloques de poder: uno encabezado por Estados Unidos, otro por Rusia y un tercero por China. «Argentina es el mayor aliado estratégico de Estados Unidos en la región«, afirmó, al tiempo que defendió el rol de las fuerzas armadas estadounidenses en la lucha contra el narcotráfico en el Caribe y el Pacífico, destacando la necesidad de «una política firme frente al crimen organizado y las ideologías que han frenado el desarrollo del país».
