La tensión entre Karina Milei y Victoria Villarruel volvió a quedar expuesta en el Senado, durante la jura de Patricia Bullrich como flamante senadora de La Libertad Avanza. La secretaria general de la Presidencia ingresó al Congreso acompañada por el jefe de Gabinete, Manuel Adorni, pese a la resistencia previa atribuida a la vicepresidenta. Según confirmó la agencia Noticias Argentinas, la presencia del círculo cercano del presidente reactivó un conflicto que lleva meses sin resolverse y que afecta el funcionamiento interno del oficialismo.
Desde temprano, el gesto tuvo una lectura política evidente. Karina Milei y Adorni arribaron al recinto sin invitación formal. Se ubicaron en uno de los palcos principales. En ese sentido, mostraron apoyo directo a Patricia Bullrich. La decisión generó sorpresa dentro del Senado. Fuentes cercanas a Villarruel señalaron que “no tenían conocimiento” de la maniobra. De esa manera, intentaron despegarse de cualquier especulación, aunque el ruido político ya era evidente.
La agencia NA reveló que la ministra insistió en que los funcionarios asistieran. Esto buscaba evitar interpretaciones de distanciamiento dentro del Gabinete. Bajo ese marco, Bullrich habría pedido una señal de respaldo en un día clave para su desembarco legislativo. El gesto no pasó desapercibido. Tampoco la presencia del ministro del Interior, Diego Santilli, quien reforzó la idea de un alineamiento entre sectores del oficialismo no siempre coordinados.
La relación entre Villarruel y la Casa Rosada es fría desde hace meses. No hay diálogo fluido. La vicepresidenta se mueve como una figura autónoma dentro de la administración libertaria. En varias oportunidades, Milei la mencionó como “traidora”. El apodo surgió tras episodios públicos, como el saludo evitado durante el Tedeum del 25 de mayo. Bajo ese marco, el choque político se intensificó.
Un vínculo deteriorado que marca el ritmo del Gobierno
Fuentes del Ejecutivo sostienen que Villarruel busca “hacer su propio camino”. Según versiones internas, la vicepresidenta intentaría consolidar una estructura propia con vistas al futuro. De esa manera, la acusan de actuar en detrimento del presidente. Una fuente del entorno de Milei afirmó que “intenta voltearnos para asumir”. Esa frase sintetiza el malestar de la Casa Rosada.
La polémica se amplificó hace algunas semanas. Villarruel protagonizó una noche de actividad intensa en redes sociales. Dio “me gusta” a publicaciones que la postulaban como candidata presidencial para 2027. En sectores del oficialismo, la reacción fue de incredulidad. “¿En serio le dio me gusta a eso?”, expresó un dirigente cercano al presidente. Para ellos, el gesto expuso ambiciones personales incompatibles con la unidad interna.
En paralelo, la vicepresidenta lanzó mensajes críticos hacia el Ejecutivo. Acompañó comentarios de usuarios que expresaban “decepción” con la gestión. Sus palabras apuntaron, sobre todo, a Karina Milei. Señaló que lo importante es que la ciudadanía sepa que no roba, que trabaja y que actúa con responsabilidad. Además, aseguró que “no ha realizado ninguna traición”. Los comentarios fueron interpretados como una defensa pública frente a acusaciones no dichas de forma directa.
SI, JURO pic.twitter.com/iKnUow7uN4
— Patricia Bullrich (@PatoBullrich) November 28, 2025
