Realmente fuerte fue lo que se dio a conocer hace algunos días en el mundo del espectáculo: tiene que ver con Marcelo Tinelli y su familia. Su hija Juanita Tinelli apareció con un extenso comunicado en las redes sociales. La modelo apuntó contra su padre y reveló haber recibido amenazas de muerte, razón por la que le fue otorgado un botón antipánico.
Aunque en el mensaje Juanita Tinelli no responsabilizó directamente a su padre por el llamado que recibió, sí se refirió a la situación familiar que atraviesan hace ya bastantes años. Afirmó no estar para nada de acuerdo con las decisiones que ha tomado Marcelo Tinelli empresarialmente, y es que son varias las deudas que el conductor acumula en su haber.
Todo terminó de explotar cuando apareció en escena Soledad Aquino, la primera esposa de Marcelo Tinelli. En conversación con la prensa tildó a Juanita Tinelli de «mentirosa» y aseguró que todo fue planeado por ella y su madre, Paula Robles. «No le creo la denuncia a Juanita. Lo inventó para llamar la atención. La atención del padre. Para ni no la llamaron ni la amenazaron», analizó.
Sin duda esta situación dividió por completo a la familia, y es que quien se sumó a la contienda fue la propia Cande Tinelli. Lejos de ponerse en el lugar de su hermana Juanita, respaldó las declaraciones de su madre y salió al cruce de las dos ex esposas de Marcelo Tinelli, Paula Robles y Guillermina Valdés.
En un posteo que compartió Soledad Aquino en defensa de Marcelo Tinelli, Cande Tinelli apareció en los comentarios y se refirió a un aprovechamiento económico de parte de las ex esposas de su padre. “La única ex que no se quedó con nada y aún así lo sigue apoyando. Sos única mamá”, comentó sin filtro la cantante.
El posteo de Juanita Tinelli
A través de su cuenta de Instagram Juanita Tinelli escribió: “Durante mucho tiempo elegí callar. Callar por miedo, por costumbre, por amor y fidelidad para proteger a quienes más amo. Pero hay momentos en los que el silencio deja de ser refugio y se convierte en una carga que duele más que cualquier palabra. Fui amenazada, y aunque no quiero detenerme en los detalles, eso fue suficiente para entender que no puedo seguir viviendo con miedo por decisiones que no tomé».
«Hablar, hoy, no es un impulso ni un acto de rebeldía: es una necesidad, y por sobre todo un derecho. Durante años prioricé a mi familia, especialmente a mi papá, por encima de mí misma. Lo hice desde ese amor incondicional que uno tiene por su familia, desde la entrega y desde ese instinto de cuidar. Pero en ese intento, también me fui olvidando de mí, de mi salud emocional, y mis propios límites. Y hoy elijo recuperarlos”, disparó.
“No comparto ni avalo muchas de las decisiones que mi papá ha tomado en los últimos años. Creo que esas acciones lo han llevado a atravesar momentos difíciles que no me corresponden, pero si me afectan profundamente. No puedo responsabilizarme por lo que no hice, pero sí por lo que siento y por cómo eso me atraviesa, a tal punto de temer por mi vida, por mi libertad», sentenció Juanita.

