La reforma laboral que impulsa Javier Milei avanza sin pausa en el Consejo de Mayo y se encamina a llegar al Congreso a mediados de diciembre. En paralelo, la nueva conducción de la CGT se reunirá este lunes para definir qué postura adoptará frente a un texto que, según advierten sus propios dirigentes, recupera medidas del DNU 70 que el sindicalismo ya rechazó y logró frenar en la Justicia.
Gerardo Martínez (UOCRA), miembro del Consejo de Mayo y referente clave de la central obrera, volvió a dejar en claro el rechazo del movimiento sindical al borrador que trabaja el Gobierno. “Expresamos un contundente y categórico rechazo a cualquier intento de reforma laboral”, afirmó. Y advirtió, además, que el reciente acuerdo comercial con Estados Unidos incorpora compromisos laborales que obligan a la Argentina a respetar estándares internacionales.
Martínez subrayó que el capítulo laboral del acuerdo con EEUU establece que el país debe prohibir la importación de productos fabricados con trabajo forzoso y reforzar el cumplimiento de leyes laborales. Para la CGT, esto remarca que algunos puntos que Milei busca reformar podrían contradecir convenios de la OIT sobre libertad sindical y derecho de huelga.
Un proyecto con 10 puntos que anticipan un choque frontal
Según fuentes del Consejo de Mayo, hay al menos diez propuestas dentro del borrador oficial que la CGT rechaza de plano y que podrían desencadenar un conflicto de alta intensidad entre el Gobierno y la central obrera si se mantienen en la versión final.
1. Fin de la ultraactividad automática
El proyecto limita la continuidad automática de los convenios vencidos: solo se mantendrán las cláusulas normativas, mientras que las obligacionales caerán. Para la CGT, esto rompe la paz social y desarticula acuerdos históricos.
2. Prioridad para los convenios por empresa
Los convenios de menor alcance prevalecerán sobre los de actividad. La central sindical acusa un intento de fragmentar la negociación colectiva y debilitar el poder de los gremios nacionales.
3. Restricción de las cuotas solidarias
Los aportes de trabajadores no afiliados solo podrán aplicarse con autorización expresa. La CGT considera que esto pone en crisis el financiamiento sindical.
4. Regulación de la huelga en servicios esenciales
Se fijan mínimos de cobertura del 75% y 50%, según el tipo de servicio. Para la central obrera, es más restrictivo que los estándares de la OIT.
5. Salarios dinámicos
Introduce un componente transitorio y variable ligado al mérito individual y a la situación de cada empresa. Los gremios alertan que busca achicar el salario básico.
6. Asambleas con autorización previa
Las reuniones internas requerirán permiso, algo que el sindicalismo interpreta como un intento de limitar la acción colectiva en los lugares de trabajo.
7. Cambios al principio de norma más favorable
El Gobierno sostiene que busca reducir litigiosidad. La CGT teme que los jueces interpreten en contra del trabajador.
8. Banco de horas y jornada promedio
Se flexibiliza la organización horaria. Los gremios advierten riesgo de eliminar horas extra y precarizar descansos.
9. Vacaciones fraccionadas
Se podrán dividir en períodos mínimos de siete días. La CGT lo considera una facultad excesiva para los empleadores.
10. Sanciones ampliadas por bloqueos
El proyecto castiga no solo provocar, sino también “instar u organizar” bloqueos sindicales. La central obrera advierte una “criminalización encubierta” de la protesta.
Mientras estas definiciones avanzan dentro del Consejo de Mayo, la CGT ya prepara su próxima jugada. La conducción renovada que asumió hace pocas semanas deberá resolver si enfrenta al Gobierno con una estrategia de presión escalonada o si avanza hacia medidas de fuerza más contundentes.
