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ESPECTÁCULO

Marcela Tineyre rompió el silencio sobre su vínculo con Mirtha Legrand: «Ahora es»

 

La conductora abrió las puertas de su intimidad y dio detalles de su vínculo con la diva y con la actriz.

 
Mirtha Legrand

Marcela Tinayre celebró este fin de semana sus 75 años rodeada de afecto, familia y anécdotas. La conductora festejó con una cena íntima junto a sus seres queridos, entre ellos su madre, Mirtha Legrand, quien le dedicó un tierno mensaje en redes: “Siempre estaré a tu lado”. En medio del clima de celebración, Marcela se sinceró sobre su historia familiar durante su paso por el programa Fin del Mundo (Olga), conducido por Lizy Tagliani.

Antes de recibirla, Lizy expresó su admiración: “Ella siempre acompañó, primero a su mamá, después a su hija. Muchas veces el ego no te deja ver el amor, y Marcela siempre estuvo ahí, acompañando y defendiendo”.

Entre risas, Marcela Tinayre tomó el micrófono y retrucó divertida: “¿Qué es eso de que me corrí? Yo no me corrí de ningún lado”. Luego, más reflexiva, habló del espíritu trabajador que atraviesa a las tres generaciones Legrand-Viale: “En mi familia trabajamos todos. Es una de las cosas más lindas que tenemos. Nadie se mete en el trabajo del otro, pero siempre estamos: ‘Qué bien, hacelo, animate… o che, estuviste pésimo’”.

En qué se parecen Marcela Tinayre y Mirtha Legrand

Consultada sobre en qué se parece a su madre, Marcela fue honesta: “Mi mamá trabaja desde los 14 años. Trabajó muchísimo y por ahí no estuvo tan cerca nuestro, pero no tengo ausencia de mamá ni de papá. Nos pasaron la cultura del trabajo”.

También marcó una diferencia entre la Mirtha de antes y la de hoy: “Ahora está muy familiera. Se preocupa, te llama, pregunta si estás bien. Antes eso no pasaba. A mí me criaron mucho mis niñeras. Las amé profundamente. Cuando quedé embarazada por primera vez, se lo conté antes a ellas que a mi mamá”.

Lejos de reproches, Marcela Tinayre destacó el legado de sus padres: “Nos enseñaron valores y gracias a su esfuerzo disfrutamos de muchas cosas”. Y sobre su propio camino como madre, confesó: “Hubo un tiempo en que tenía tres trabajos y no estaba nunca en casa. Hasta los trece años de mis hijos, nunca pasé un Día de la Madre con ellos”.