La China Suárez volvió a convertirse en tema de conversación tras su visita a Otro Día Perdido (eltrece). En una charla íntima con Mario Pergolini, la actriz soltó una revelación que nadie esperaba: estuvo literalmente a un paso de casarse con Benjamín Vicuña. Aunque la separación entre ellos ya quedó atrás y hoy mantienen una relación cordial por sus hijos, nunca había contado con tanto detalle lo cerca que estuvieron de llegar al altar.
“Estuve a punto de casarme. Teníamos salón, catering… todo listo”, lanzó sin rodeos. La confesión tomó por sorpresa al conductor, que de inmediato quiso saber si ya habían pagado el servicio. Suárez aclaró que aún no habían hecho el desembolso final, pero sí avanzado lo suficiente como para dejar claro que el casamiento estaba en marcha. “Habíamos visto todo, organizado todo, pero todavía no estaba pagado”, explicó.
Por qué la China Suárez no quiso casarse
La actriz reveló que, aunque desde chica soñaba con ser madre, el matrimonio siempre le generó cierta resistencia interna. “Cuando una pareja me hablaba de casarnos, yo decía: ‘¿para qué, si después terminamos separándonos?’”, confesó. Esa idea la acompañó durante años y, según explicó, se volvió un freno a la hora de concretar el compromiso con Vicuña.
Al profundizar sobre el origen de ese miedo, Pergolini, en Otro Día Perdido le preguntó si estaba relacionado con su historia familiar. La China no tuvo dudas: recordó que sus padres se separaron cuando ella tenía 11 años y que el episodio la marcó profundamente. “Nunca escuché una pelea. Un día simplemente se separaron. Eso me llamó mucho la atención, porque la gente se separa peleándose, y en mi casa no pasaba”, relató.
Mario hizo la pregunta que estábamos esperando: ¿Cuándo se casan Mauro y La China?
— OTRO DÍA PERDIDO (@otrodiaperdidok) November 15, 2025
Final explosivo en #OtroDiaPerdido ? pic.twitter.com/sPQozLV4D9
Con el tiempo entendió que esa vivencia influyó en su forma de vincularse. Admitió que durante muchos años tuvo “muy poca tolerancia” en las relaciones y que debió trabajar ese aspecto para no repetir patrones. Aun así, sigue admirando a quienes pueden sostener matrimonios largos y estables: “Escucho a parejas que llevan 30 o 40 años juntas y me encanta, pero siento que a mí no me hubiese ocurrido”.
