La última encuesta nacional de la Universidad de San Andrés (Udesa) volvió a mostrar un dato que incomoda al kirchnerismo y al peronismo: pese al paso del tiempo y al triunfo libertario en las elecciones de medio término, gran parte de la sociedad sigue responsabilizando al gobierno de los Fernández y Sergio Massa por la crisis económica actual. A ello se suma otro golpe político: la oposición no logra construir un liderazgo creíble y consistente.
El relevamiento, realizado tras la victoria electoral de La Libertad Avanza e integrado por 1.005 casos en todo el país, consultó a los argentinos sobre quién consideran que encarna hoy el liderazgo opositor. Los resultados dejaron en evidencia una profunda orfandad política en ese espacio, en contraste con el ordenamiento interno que logró el oficialismo.
Cristina y Kicillof arriba, pero con un techo evidente
Según el estudio, Cristina Kirchner encabeza la lista con el 26%, seguida por Axel Kicillof con el 25%. Son números llamativos porque muestran que, aun con su peso político, ninguno logra convertirse en una referencia nítida para la mayoría de los ciudadanos. Lejos de consolidarse como una alternativa real al gobierno de Javier Milei, ambos dirigentes apenas se sostienen sobre núcleos duros ya conocidos.

Sin embargo, el dato más revelador no está en ellos, sino en lo que aparece inmediatamente después: un 23% sostuvo que directamente “no hay líder de la oposición”. Y si se suman los que respondieron “no sé” (15%) y “prefiero no responder” (4%), el número trepa al 42%. Es decir: para casi la mitad del país, la oposición no existe como fuerza ordenada ni con conducción clara.
Cinco dirigentes quedaron en 0%: un papelón político
Debajo de los nombres más conocidos, el desplome es total. Juan Grabois y Mauricio Macri obtienen apenas 2%, mientras que Sergio Massa, el candidato presidencial derrotado en 2023, cae a un mínimo 1%. El resto directamente quedó en 0%: Facundo Manes, Miguel Ángel Pichetto, Martín Lousteau, Guillermo Moreno y Horacio Rodríguez Larreta.

El contraste con el oficialismo es contundente: mientras Milei y la jefatura de Gabinete logran sostener niveles de influencia ordenados, la oposición dispersa sus referencias entre figuras con poco peso político efectivo.
Qué dicen los que aprueban y los que desaprueban a Milei
La encuesta también discriminó según afinidad política. Entre quienes aprueban la gestión del Presidente, la falta de liderazgo opositor se profundiza: el 29% cree que no existe un referente, acompañado por un 16% que no sabe y un 4% que prefiere no contestar. Cristina y Kicillof aparecen lejos, con 26% y 20% respectivamente.

Entre quienes desaprueban al Gobierno, se invierte apenas el orden, aunque sin cambios estratégicos: Kicillof queda con 30% y Cristina con 27%, pero tampoco logran superar los niveles de incertidumbre interna que muestran los números de “no hay líder”.
El veredicto social: una oposición sin rumbo en plena reconfiguración
Los resultados de Udesa confirman que el efecto Milei reordenó el mapa político. Mientras el oficialismo consolida apoyos y mantiene un núcleo duro estable, la oposición se muestra incapaz de reconstruir una figura con verdadera proyección nacional. El kirchnerismo no logra salir de su laberinto interno, y el resto de las fuerzas opositoras siguen atrapadas entre viejos liderazgos agotados y nuevos dirigentes sin volumen político.
