El clima de reconciliación absoluta entre Wanda Nara y Maxi López parece un milagro después de más de una década de enfrentamientos públicos y guerras judiciales. Aquella pareja que supo protagonizar los titulares más escandalosos hoy se deja ver entre risas y complicidad, compartiendo cenas y hasta chistes en cámara. El cambio no solo sorprendió al público, sino también al propio entorno mediático: ¿cómo pasaron del odio a la armonía?
Las imágenes de ambos en el estudio de MasterChef Celebrity (Telefe) fueron el primer indicio. Pero el verdadero quiebre se verá esta semana en “Ferne? con Grego”, el ciclo conducido por Grego Roselló, donde Wanda y Maxi protagonizan una charla cargada de tensión, humor y viejas cuentas pendientes.
El adelanto de la entrevista a Wanda Nara y Maxi López
El adelanto ya genera expectativa: “Amigos, este jueves en Fernet con Grego, el invitado es Maxi López”, anuncia el conductor, mientras la cámara enfoca al exfutbolista que promete: “Vamos a hablar de todo, sí”. Lo impensado ocurre segundos después, cuando Wanda irrumpe en escena con tono pícaro: “Ojo lo que van a hablar ustedes dos, porque yo estoy muy cerca en este canal… y quizás me siente un ratito”, lanza entre risas.
Pero no todo es humor. En un pasaje de la charla, Wanda recordó los momentos más oscuros de su relación: “Pero en un ataque de ira, así tipo rompiéndole las Ferrari”, confesó, en alusión a los episodios violentos que alguna vez circularon como rumor. Aquella historia, contada años atrás por Luis Ventura, finalmente se confirmó: “Ella agarraba un bate de béisbol y se iba a destrozar los autos de Maxi López”, recordó el periodista.
Lejos de incomodarse, Maxi eligió seguir el juego. Y hasta hubo espacio para otro momento descontracturado, cuando Wanda le recordó a Grego su antiguo intento de conquista: “Después me cae con flores. Cuatro rosas”. Él corrigió: “Eran ocho”. Pero ella remató sin dudar: “Si a tu amigo casi lo ‘icardias’ conmigo, si yo te daba cabida”.
El programa promete ser un punto de inflexión. Lo que antes era tabú hoy se transforma en una charla sin filtros, donde el pasado se convierte en anécdota y el rencor cede ante la ironía. Wanda y Maxi, por primera vez, se ríen de su propia historia.
