El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, profundizó en las últimas semanas una agenda política de alcance nacional, comenzó a mover fichas. Con actividades oficiales, acuerdos de cooperación y encuentros partidarios, el mandatario comenzó a fortalecer vínculos fuera del territorio bonaerense, en un contexto de reordenamiento interno dentro del peronismo y de proyección a mediano plazo.
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Expansión territorial y armado político
Kicillof inició una serie de recorridas por distintas provincias con el objetivo de consolidar presencia política y fortalecer alianzas. La primera escala fue Formosa, donde mantuvo encuentros institucionales con el gobernador Gildo Insfrán y participó de la firma de convenios de cooperación entre ambas administraciones.
En esas actividades lo acompañaron ministros de su gabinete con perfil político, entre ellos Andrés Larroque y Carlos Bianco. Según fuentes oficiales, la agenda incluyó reuniones con dirigentes locales y referentes sociales, además de actos públicos vinculados a políticas de gestión.
El gobernador también mantiene diálogo con otros mandatarios provinciales de Unión por la Patria, como Gustavo Melella, Ricardo Quintela, Sergio Ziliotto y Gerardo Zamora. En ese marco, se avanzó en la coordinación de acciones comunes en áreas como producción, desarrollo social y obra pública.
Movimiento Derecho al Futuro y escenario interno
En paralelo a la agenda institucional, Axel Kicillof comenzó a mover fichas e impulsó encuentros del Movimiento Derecho al Futuro (MDF), el espacio político que promueve desde su gestión. En un plenario realizado en Ensenada, aclaró que las actividades no implican el lanzamiento de una candidatura, aunque remarcó la necesidad de ampliar la construcción política más allá de Buenos Aires.
El MDF ya cuenta con mesas de trabajo en distritos como la Ciudad de Buenos Aires y varios municipios bonaerenses. En esos espacios participan funcionarios provinciales, legisladores y dirigentes territoriales, con presencia de organizaciones sociales y sindicales.
En el plano nacional, el armado tiene representación limitada en el Congreso, aunque en las últimas semanas sumó nuevos apoyos políticos. La estrategia se desarrolla en un contexto de tensiones internas dentro del peronismo, especialmente por la conducción partidaria en la provincia de Buenos Aires.
