Catalia Gorostidi volvió a poner en agenda el debate sobre los trastornos de la conducta alimentaria al referirse a su propia experiencia personal, marcada por años de lucha, recaídas y exposición pública.
La ex participante de Gran Hermano habló, frente a las cámaras de El Trece, sobre cómo convive actualmente con su cuerpo, la presión de las redes sociales y las críticas constantes, y dejó en claro que su vínculo con la imagen corporal sigue siendo un proceso complejo, atravesado por momentos de aceptación y otros de conflicto.
A partir de allí, Cata fue totalmente sincera sobre su presente físico y emocional: “Sigo flaca. Estoy acostumbrada a esto, lo tengo hace muchos años y tengo recaídas”. También contó que le resulta difícil volver a su peso saludable porque su autopercepción no siempre coincide con lo que los demás ven: “Me cuesta volver a mi peso porque yo me veo y me gusta como estoy, pero subo una foto y son terribles los comentarios, aunque yo se los redoblo porque me importa un car… lo que piensen los demás de mí”.
Incluso reconoció que, por momentos, decide exponerse más frente a las críticas: “Yo lo redoblo y busco una foto en donde estoy más flaca y la subo a propósito para que tenga 200 millones de comentarios, no me importa que me digan ‘bolsa de huesos’, no me importa nada”.
La influencer aclaró que su postura no implica promover la delgadez extrema: “Yo no hago apología de la delgadez… yo subo una foto mía y al que le molesta lo siento, es mi cuerpo”. Y recordó cómo fue cuestionada en el reality: “En su momento me decían que estaba gorda cuando entré en Gran Hermano, pero no lo estaba, tenía 20 kilos arriba de lo que estoy ahora”.
