Diego Spagnuolo, exdirector de ANDIS, presentó un descargo ante el juzgado federal de Sebastián Casanello, tras negarse a declarar. Allí aseguró no tener vínculos con el presunto sistema de coimas, argumentando que no intervenía en selección de proveedores ni en procesos técnicos. El texto busca desligarlo de las imputaciones y justificar su rol operativo dentro del organismo.
Negaciones, contradicciones y un señalamiento a Garbellini
Spagnuolo sostiene que todas las etapas del sistema PAC-B dependían exclusivamente de la Dirección Nacional de Acceso a los Servicios de Salud, a cargo de Gabriel Garbellini, a quien se acusa como principal responsable operativo. En su descargo afirma que su subordinado “ni siquiera fue designado” por él y que la fiscalía intenta imponer una cadena de mando inexistente. Para su defensa, esta estructura demostraría que no tenía control directo sobre los procesos investigados.
Pese a ello, el documento reconoce de manera implícita una posible omisión de control, lo que abre la puerta a cuestionamientos sobre su responsabilidad jerárquica. La estrategia, según analizan los especialistas, parece orientarse más a reducir una eventual pena que a negar de forma categórica toda responsabilidad. El planteo genera dudas dentro del ámbito judicial sobre la coherencia de su posición.

El punto más polémico del escrito
La parte más llamativa del descargo es cuando Spagnuolo cuestiona la lógica de la imputación señalando que, si se tratara de una estructura que “movía millones de dólares”, es absurdo acusarlo de recibir apenas cinco millones de pesos. Este argumento fue interpretado como una defensa débil, ya que no rechaza con contundencia la existencia de pagos, sino la magnitud atribuida por la fiscalía. Analistas consideran que esa formulación podría jugar en su contra.
Fuentes judiciales remarcan que el exfuncionario no desmintió de manera directa los audios incorporados a la causa, limitándose a cuestionar su validez sin negar explícitamente su contenido. Esa ausencia resulta llamativa para los investigadores, que analizan si la estrategia responde al temor de comprometer a terceros involucrados en la operación. La defensa sostiene, en cambio, que los audios están descontextualizados y no prueban maniobras ilegales.
Otro punto relevante es que, hasta el momento, ninguno de los imputados que prestaron declaración comprometió directamente a Spagnuolo, aunque varios apuntaron a Garbellini. Esta circunstancia alimenta el debate acerca del verdadero alcance de las responsabilidades dentro de la estructura de ANDIS. Aun así, la fiscalía insiste en que la falta de control constituye un elemento central para sostener la acusación.
