El Senado se encamina a una sesión decisiva en la que el Gobierno pone en juego dos iniciativas centrales de su agenda: el Presupuesto 2026 y la denominada Ley de Inocencia Fiscal. Para el oficialismo libertario, el objetivo es cerrar el año legislativo con una señal clara hacia los mercados sobre gobernabilidad, control político y capacidad de gestión. Sin embargo, el escenario aparece atravesado por fuertes tensiones con la oposición, quienes adelantaron que rechazarán la propuesta por el jefe de bloque, José Mayans.
«A las 10 hay Labor Parlamentaria para establecer la metodología de trabajo. Este tratamiento exprés daña al país, y debería volver a diputados por varios temas: por la educación, el artículo 30; por el tratamiento exprés de la deuda externa; por el sistema previsional de las provincias, que han incumplido por dos años; por la inversión pública tan desconsiderada en este presupuesto, y para que venga el ministro a explicar, porque Caputo no aparece, desprecia al Parlamento», afirmó Mayans en declaraciones a Radio 10.
El senador fue todavía más duro al cuestionar el trasfondo político del proyecto. «Este presupuesto hace a Milei un gobierno de facto, y eso no lo vamos a permitir«, lanzó José Mayans, y agregó: «Es nefasto, va a traer una caída muy fuerte en las provincias». Desde el oficialismo, en cambio, sostienen que la aprobación del Presupuesto es clave para ordenar el frente fiscal, avanzar en el endeudamiento y sostener el vínculo con los organismos internacionales.
El punto clave del Presupuesto 2026
La sesión fue convocada para las 12 en el marco del período extraordinario dispuesto por el presidente Javier Milei. El punto de mayor conflicto está concentrado en el artículo 30 del proyecto de Presupuesto 2026, que elimina los pisos mínimos de financiamiento para áreas sensibles como educación, ciencia y defensa.
Esa modificación generó resistencia en varias provincias y motivó un rechazo explícito del peronismo. Además, otros bloques aliados no se manifestaron sobre que postura tomarán, aunque se estima que en lo general la apoyarán, pero en lo particular tomarán diferentes posiciones a medida que avance el debate.
Polémica sobre Inocencia Fiscal
En paralelo, el Senado también debatirá la Ley de Inocencia Fiscal, otra iniciativa que despierta polémica. El proyecto propone una serie de modificaciones al Régimen Penal Tributario, a la Ley de Procedimientos Fiscales y al Código Civil y Comercial, además de crear un Régimen de Declaración Jurada Simplificada. El Gobierno presenta la norma como un cambio de paradigma en la relación entre el Estado y los contribuyentes.
Uno de los ejes centrales es la creación de un «Régimen simplificado de Ganancias», que, según la versión oficial, dejará «blindados para siempre» a quienes adhieran. El esquema establece un tope patrimonial de hasta 10.000 millones de pesos y libera a los contribuyentes de informar variaciones patrimoniales o detallar consumos. En ese marco, ARCA solo cobrará el impuesto a las Ganancias sobre los ingresos efectivamente facturados, sin controlar el crecimiento del patrimonio, y permitirá deducir los consumos de esa base imponible.
