Wanda Nara habló a fondo sobre su presente profesional en Telefe durante una entrevista con Implacables, donde se mostró reflexiva, agradecida y realista respecto a su lugar en la televisión abierta. Lejos de esquivar definiciones, la conductora hizo un balance de su recorrido reciente y del vínculo que construyó con el público, al que considera una pieza clave de este momento de su carrera.
“De lo malo siempre aprendo y lo dejo en el pasado”, aseguró Wanda Nara al referirse a las experiencias que la marcaron en los últimos años. En contraposición, destacó el costado positivo de su actualidad laboral: “Lo bueno son un montón de cosas, estoy feliz, me acompaña el público todas las noches”. En ese sentido, remarcó que no toma a la ligera el respaldo de la audiencia: “Lo valoro y lo respeto, no lo trato como algo así nomás porque sé que es difícil y hay muchas horas atrás”.
Consultada sobre su futuro dentro del canal, la mediática fue cauta pero clara. “Bake Off no sé si lo voy a conducir”, dijo, dejando abierta la incógnita sobre su continuidad en ese ciclo. En cambio, se mostró más firme respecto a otro de los programas emblema del canal: “MasterChef sí, es un formato mucho más largo”, explicó, dando a entender que allí se siente más cómoda y con mayor proyección.
Además, reconoció el desgaste que implica sostener un ritmo tan intenso de trabajo. “En algún momento me gustaría tener vacaciones”, confesó, sin ocultar el cansancio acumulado. Por último, dejó en claro cómo es su relación contractual con la señal: “Yo tengo contrato con el canal y ellos deciden dónde encastrarme”, concluyó, aceptando con naturalidad las reglas del juego televisivo.

