El Gobierno Nacional confirmó la subasta pública de tres terrenos del ex programa PROCREAR. La medida se inscribe, además, en el proceso de liquidación de activos estatales tras el cierre definitivo del plan habitacional. De este modo, la decisión alcanza a predios ubicados en Ciudad de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos.
La iniciativa quedó oficializada mediante las resoluciones 498, 499 y 500, publicadas en el Boletín Oficial. En ese marco, se dispuso que las subastas se realizarán bajo modalidad electrónica, a través del portal COMPR.AR. Asimismo, los precios base fueron establecidos por el Tribunal de Tasaciones de la Nación.
Por un lado, uno de los terrenos se encuentra en la Ciudad de Buenos Aires, en el predio Estación Buenos Aires, ubicado sobre Avenida Suárez y Luna, en el barrio de Barracas. En concreto, el inmueble cuenta con una superficie de 2.903,77 metros cuadrados y tendrá un precio base de US$ 2.977.941.
Terreno del Parque Federal en Santa Fe
Por otro lado, otro de los predios está ubicado en la ciudad de Santa Fe, sobre Avenida Belgrano 5000, entre Padilla y Agustín Delgado. En este caso, el terreno Parque Federal posee una superficie de 6.418,47 metros cuadrados y una base de subasta fijada en US$ 3.649.310,34.
El predio más extenso, en Paraná
En tanto, el tercer inmueble se localiza en la ciudad de Paraná, provincia de Entre Ríos, sobre Avenida Ejército 2751, entre Pablo H. Crausaz y General José María Sarobe. Allí, se trata del predio de mayor extensión, con 49.990,56 metros cuadrados, y un precio base de US$ 966.187,72.
Según indicaron fuentes oficiales, la venta de estos terrenos busca ordenar los activos del Estado. Además, el objetivo es permitir que el sector privado continúe con desarrollos que quedaron inconclusos tras el cierre del programa. De igual manera, las subastas contarán con intervención de los organismos de control correspondientes.
Finalmente, el cierre del PROCREAR se resolvió tras un informe de la Sindicatura General de la Nación. Entre otros puntos, el documento detectó demoras en la entrega de viviendas, gastos excesivos, reclamos por condiciones de habitabilidad y deficiencias administrativas. Por último, el Gobierno adelantó que anunciará nuevas subastas en las próximas semanas.
